El cambio (Fanfic Rubius)

Capítulo 5 - Sólo un sueño

Era todo demasiado perfecto para ser real. Demasiado. Exacto. Estaba soñando, aún no habíamos llegado a Madrid, nos quedaba una hora más o menos. Era totalmente imposible todo lo que acababa de soñar. ¿Tan ilusa soy? Pero el sueño había sido muy real, casi como si hubiera pasado de verdad pero es obvio que no ha pasado.

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Pasó esa hora y finalmente llegamos a aquella ciudad tan grande y preciosa, Madrid. Eran las 18:45 cuando llegamos a nuestro piso. Era exactamente igual que el piso que había soñado, pero sin vistas a las montañas. Era un bloque moderno a las afueras de Madrid centro. No estaba en ningún pueblo pero estaba un poco alejado del centro. Era precioso, la verdad que mis padres habían hecho una buena elección. Era un edificio blanco en perfecto estado, y las ventanas y balcones de cada piso eran cristales de color gris estilo moderno. Eran realmente bonitos. Parecía una especie de urbanización, puesto que en medio había un parque pequeño, se veía muy familiar y cada bloque tenía 5 pisos, lo que también me recuerda al sueño.

Subimos todo lo que había en el camión dejándonos un par de muebles que no quisimos subir porque ya se nos había hecho tarde y eran muy pesados, y teníamos que preparar las camas y todo lo demás.

Mi madre y yo empezamos a preparar la cena cuando de repente escuché un grito en el piso de abajo, parecía una chica riéndose muy alto.

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Era de madrugada y volví a escuchar esos gritos tan molestos. Abrí la ventana de mi habitación para ver si escuchaba de donde venían.

Abrí la ventana y los gritos venían justo debajo de mi habitación y los pude escuchar mucho mejor pero esa voz, esa voz me sonaba bastante pero no, imposible, no podía ser de Rubius. No todo iba a ser perfecto como en mi sueño y era prácticamente imposible que mi ídolo viviera debajo de mí y que su habitación estuviera justo en el mismo sitio que la mía. Es que no. Me acosté y cerré los ojos tratando de dormirme otra vez y entonces se hizo el silencio, pero justo cuando estaba casi dormida un grito súperhipermegaultraextra fuerte hizo que pegara un salto y me caí de la cama. ¿Mis padres no se había despertado por el ruido o qué? ¿Era la única que lo escuchaba? La verdad que no lo sé pero me estaba volviendo loca joder. Ese chico o esa chica tenía que parar ya, aunque no tuviera al día siguiente instituto como el en sueño, si no descanso al día siguiente me despierto con una mala hostia de cojones.

Volví a abrir la ventana y se estaba callando, aún así pegué un grito no muy fuerte:

- ¡PERDONA, ¿SABES QUÉ HORA ES?! HORA DE DORMIR JODER, CÁLLATE YA.

Escuché un murmullo y al momento se calló. Gracias a Dios podría dormir tranquila como yo quería. Pero no, la vida no quería que esa noche durmiera. Miré mi móvil y saltó una notificación de twitter de Rubius, ya que lo tengo que favoritos y cada vez que pone un tweet, twitter me manda una notificación.

"Hoy ha venido alguien nuevo al piso de arriba y pensaba que iba a ser una chica guapa pero resulta que es una amargada.".

WHAAAAAAAAAT? ¿Será casualidad o Rubius vive en el piso de abajo? No no, será casualidad, hay muchas vecinas que quieren dormir igual que yo. Otra notificación me acaba de llegar.

"Estaba grabando el nuevo capítulo de Beyond Two Salseos y me ha mandado a callar porque dice que no la dejo dormir >:(".

Pero pero pero pero pero, QUE PUTA CASUALIDAD. No me creía lo que estaba leyendo. Era muchísima casualidad. Y otra más.

"Creo que mañana iré a presentarme, como una persona normal :D pero lo mismo me pega por haber gritado esta noche D:"

Con el último tweet me quedé fría. Si él era mi vecino, ¿al día siguiente iba a tocar a mi puerta?

"Ya te estás emparanoiando Emma, es imposible, deja de hacerte ilusiones, sabes que no es tu vecino"

Me repetía a mí misma una y otra vez, quería olvidar aquella idea porque era una locura. ¿Cómo he podido pensar que mi ídolo era mi vecino? En fin. Me acosté de nuevo, cerré los ojos y me dormí.

*********

Ya era por la mañana, me levanté a las 9:00 o así. Todos estaban durmiendo porque ayer nos dimos unos buenos viajes subiendo cosas, aunque fue por ascensor, pero lo de subir y bajar y coger y descargar cansaba. La verdad que no sabía por qué me había despertado tan pronto, no tenía instituto y levantarme tan tempranos era algo muy raro en mí, y lo más raro aún es que estaba de buen humor. Impresionante. Me vestí ya que quería ver Madrid por la mañana, y ya que es tan temprano aprovecho. Fui a vestirme antes de desayunar y me puse una sudadera de color naranja con la cara de Jake el perro en medio, unos vaqueros azules ajustados y unas converse bajas negras. Me solté mi pelo rojo y me hice algunos tirabuzones. Iba bien pero no demasiado arreglada.

Fui a desayunar y entonces recordé que no había nada, sólo una bolsa de cereales y leche. No me gustaba demasiado la leche sola pero bueh, es lo que hay. Mientras desayunaba viendo Hora de Aventuras tocaron al timbre. ¿Quién sería a esa hora?

- ¿Quién es? - pregunté detrás de la puerta.

- El cartero - me contestaron al instante.

Abrí la puerta y me dio tres cartas imagino que para mis padres y me despedí amablemente.

Al minuto vuelven a tocar, se le habrá olvidado algo. Abrí la puerta esta vez sin preguntar.

- Emmm... Hola, ¿creo que eres nueva verdad?

Aquello no estaba pasando. Eso era un sueño. No. Imposible. Debía de estar soñando. Rubén estaba delante de mis narices y yo estaba como un pasmarote sin decir nada embobada. Me pellizqué para ver si aquello era un sueño.

- Oye, ¿estás bien? - dijo sacándome de mis pensamientos.

- Eh, si sí, llegué ayer al edificio - dije al fin.

- Ah pues quería decirte que si te habías tranquilizado.

What? ¿Cómo puede decir eso? ERA ÉL EL QUE ESTABA PEGANDO GRITOS A LAS DOS DE LA MAÑANA.

- ¿Perdona? Eras tú el que gritaba a las dos de la mañana.

- Tu también gritaste, ¿te lo recuerdo?

- Grité para decirte que te callaras, no podía dormir.

- ¿Y si no podías dormir que haces que no estás en el instituto?

"Joder, tiene salidas para todo".

- Llegué ayer a Madrid desde Córdoba y como verás todavía no he entrado en ningún instituto.

- Ah es verdad... Bueno, pues entonces lo siento, pero no grites más porque no me dejas terminar los gameplays y luego me acribillan las criaturitas. Aunque seguramente no sepas de que hablo... Bueno me voy ya - le interrumpí antes de que pudiera decirme adiós. Ahora que lo pienso... ¿acabo de pelearme con mi ídolo?

- ¡No, espera!

- Sí, me tengo que ir... No sé que hago hablando de esto contigo. Bueno, un placer, yo soy Rubén muyaya - dijo bajando las escaleras.

- Ya lo sé - Rubén se quedó parado en seco.

- ¿Como que ya lo sabes?

- Claro que lo sé Rubius.

- ¿Eres criaturita? - me preguntó súper sorprendido.

- S-s-s-si... - dije tartamudeando.

- Ah... Pues encantado (?)

- Emma, me llamo Emma.

- Adiós, ya nos veremos.

Me sorpredió su reacción. No ne esperaba que se lo hubiera tomado tan mal lo de que una fan fuera su vecina. Pero en fin, al menos sé que es él. Pero no puedo decirle a nadie que es mi vecino. Ni siquiera a Val ni a Álvaro. Esto debía quedarse para mí.