Dejame Amarte

Un encuentro del destinó

Las hojas de los árboles se mecian al compas del viento, el pasto crujía ante las pisadas de varios niños que jugaban en el. A unos cuantos metros de ese mismo parque se encontraba sentado en una banca color blanco ya algo desgastada un triste azabache mirando a la nada perdido en sus recuerdos...¿la razón?.

El dia de ayer la persona de la que había estado enamorado desde hace mas de 15 años, le había dicho que se iba a casar, el nombre de esa persona era Erwin Smith, su mejor "amigo" desde la secundaria, y como no iba estar triste si había estado enamorado de ese maldito rubio Cejon desde la primera vez que lo vio, lo recordaba perfectamente.

Un joven azabache de piel blanca estaba caminando tranquilamente hacia su instituto, de la nada dos tipos aparecen tomándolo por sorpresa y llevándolo en dirección aún sucio callejón donde es empujado duramente contra la pared, haciendo que su mochila se cayera al suelo.

- ¡Ah!, por favor no me hagan daño - suplico con temor.

- Sino quieres que te hagamos nada será mejor que te calles y saques de tus mugrosos bolsillos todo el dinero que tengas - uno de los sujetos que era rubio y alto extendió su mano al de piel blanca.

- ¿D-dinero?, y-yo no tengo.

- ¡No nos mientas maldita rata! - el otro era pelinegro e igual de alto.

- Es e-encerion no t-tengo.

- Mmm, esta bien - dijo el rubio y el azabache suspiro aliviado - Eres muy lindo.

- ¿Eh?

- Si no tienes dinero, entonces vas a darnos otra cosa - metio su mano debajo de su camisa haciendo que el mas bajo temblara de miedo y sintiera náuseas.

- ¡N-no basta!, ¡por favor! - forcejeo con el sujeto y por acciedente le dio una cachetada.

- ¡Hijo de puta¡ - levanto la mano en forma de puño en direccion al azabache que cerro los ojos con fuerza esperando un golpe que nunca llego, abrio con algo de miedo uno ojos y vio como un sujeto desconocido sosteniendole el puño al otro.

- Oye, ¿que crees que haces?.

- Tch, esto no es tu problema, ¡largate! - jalo su brazo de una manera brusca para que lo soltara, pero aquel sujeto no lo hizo.

- Tal vez no sea mi problema, pero si de la Policía - saco su telefono y empezó a marcar - ¿Hola policia?, estoy siendo testigo de un asalto a un menor.

- Tch, vamonos - el rubio soltó al azabache que callo al suelo, para largarse con el otro tipo.

- Olvidelo, ya se fueron - guardo su telefono en su pantalon y extendió su mano al oji-azul - ¿Estas bien?

- S-si - contestó un poco sonrojado, "Es muy guapo" penso en sus adentros.

- Soy Erwin Smint, ¿y tu?.

- L-levi...Levi Ackerman - dijo y se quedaron viendo un tiempo, en ese tiempo Levi pudo apreciar con mas detenimiento a su salvador, era mucho mas alto que el, rubio, ojos azules y unas enormes cejas, se hubiese quedando viéndolo por mas tiempo, si no fuera por un grito hizo que desviera la mirada.

- ¡Cejon¡ - grito una desaliñada castaña con lentes que venia corriendo hacia ellos, sin percatarse de la presencia del azabache - Te estuve buscando ¿donde demonios est... - apenas se habia percató de la presencia del azabache - ¿Cejon quienes es el?.

- Hange, el es Levi Ackerman.

- Un gusto enanin, mi nombre es Hange Zoe - sonrió con alegria y tomo la mano del azabache para moverla de arriba a bajo repetidas veces.