Regreso

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Aunque en mis planes no estaba salir, he reflexionado sobre el tema y decidí que llegando a casa invitaré a algún lugar cómodo a Olivia, debo de agradecerle que me esté salvando de la agonía en la que vivía (aunque ella no lo sepa).

***

-He llegado ¿que hacías?-
-Hola Millán, solo veía algo de t.v. para no aburrirme-

Se ha puesto muy linda y me fascina saber que lo ha hecho solo para mí

-Te ves hermosa-
-Gracias-

Cuando se sonroja se mira muy bella no lo puedo negar

-Vamos a aprovechar que te ves así de hermosa, iremos al mejor restaurante de la ciudad-

Caminábamos por las calles tomados de las manos y bromeabamos, todo parecía perfecto hasta que en una esquina había una joyería, yo no había dado cuenta de ella hasta que Olivia hizo una parada para "admirar" un juego de collar y aretes, sé que su intención obviamente era que yo se los comprara y que hice? Pues se los compré, siempre he sabido qué es lo que quieren las mujeres y además agradezco la sutil insinuación a que se lo comprara; no fue tan descarada como Salma.

-Gracias por la joyas, pero no eran necesarias-

Claro que eran necesarias y lo sabemos ambos

-No fue nada,las lucirás hermoso-
-Puedo hacerte una pregunta?-

Mientras no preguntes idioteces como hace unas horas

-Por supuesto, te escucho-
-Cuando las mesas de negociación se acaben y debas volver a tu casa ¿Qué sucederá con... nosotros?-

No me había puesto a pensar en eso, Olivia es bonita, algo inteligente y se desvive por mí... quizás la lleve conmigo o yo me quedé aquí, después de todo, nada me obliga a volver.

-No sé la respuesta para esa pregunta Olivia-
-Tienes novia?-

Cuando me pregunta esto, vienen a mi mente imágenes de Penélope, mi hermosa y odiada Penélope; no he revisado los últimos reportes, aunque miro el rostro de Olivia algo triste y recapacito ¿mi decisión? Quedarme aquí, con Olivia...

Después de mi resolución una parte de mi se sintió mejor, es como si hubieran quitado una carga de mi vida; Olivia descansa tumbada en la cama y solo una ligera sabana de seda cubre su bien formado cuerpo, yo estoy pegado a la computadora escribiéndole a Cinthia que ya no quiero más reportes, pero que sigan ayudando a Penélope al menos hasta que se medio reponga todo el daño que le hice.

Estaba a punto de enviar el correo cuando me llegó uno a mi, era un reporte y se presumía importante, dirigí mi mirada hacia Olivia y quise desistirme a abrirlo por ella, pero se abrió una foto, era Penélope con un sujeto y él la abrazaba.

Es indescriptible toda la furia que desató esto, arroje mi computadora de un golpe (haciendo que se despertara Olivia algo confundida) tomé mi celular y llamé a mi piloto que debíamos volar enseguida de regreso y que quería todo listo para partir a primera hora, comencé a buscar mis maletas para empacar todo y largarme ¿Cómo puede hacerme esto Penélope? Olivia seguía hablándome pero yo no le presté atención, mi cabeza estaba bloqueada por la escena que ví en esa maldita foto, cuando me fui tranquilizando solo me senté en la orilla de la cama y le ordené con gritos a Olivia que se largara a otra habitación, ella me obedeció con miedo y una vez solo, sostenía mi cabeza con mis manos debía de recuperar a Penélope, es lo único que yo debía y quería hacer, a la mierda Olivia, a la mierda cualquier mujer; quiero a Penélope para mí...

Permítame Disculparme (porque todos nos equivocamos) [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora