La nueva

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He pedido informes diarios sobre lo que haga Penélope en el día, también he encargado que si notan que ella desea algo, hagan que lo obtenga, pero de una manera sutil para que no sospeche nada.

Se me hace tan difícil alejarme de ella, incluso de su biblioteca que se ha convertido en mi segundo lugar favorito el primero siempre será dónde quiera que se encuentre Penélope

Para sentirla cerca he traído conmigo uno de sus libros favoritos "La teoría del método" de René Descartes ¿Quién diría que este economista terminaría leyendo Filosofía? Bueno eso solo sucede cuando quieres que alguien sea para ti .

Cada tanto del día me mandan fotos de Penélope, en cada una de ellas se mira hermosa, pero cambia todo drásticamente cuando en una de mis reuniones en Londres entra una proyectista hermosa, que de primera vista roba mi atención y yo la de ella.

Cuando termina la junta, hago algo de tiempo, según yo, revisando algunos documentos hasta que nos quedamos solos en la sala y me acerco para hablarle

-Permítame presentarme, mi nombre es Millán Caruso-

La joven no puede creer que me le acercara, sus ojos tiemblan, y ella se ha quedado muda por un instante

-Mucho gusto Sr.Millán me llamo Olivia-

Lo primero que pienso es "Como la cerdita del programa" y lo segundo "esperaba un nombre dulce como Penélope"

-Sé que estás trabajando y no quiero importunar, te dejo mi tarjeta; llámame o escríbeme más tarde si gustas-

Encantada recibe mi tarjeta y después de 20 minutos ya tengo un mensaje de ella.

He invitado a tomar unas copas a Olivia y ella encantada. Preparo mi apartamento y dejo lejos el libro de Descartes, no quiero que se le ocurra a esta mujer hacer alguna pregunta sobre esto porque soy capaz de echarla a patadas en ese instante .

-Y bien Olivia, cuéntame de ti-
-Bueno, tengo 26 años, estudie para secretaria, soy Piscis, hace algún tiempo que termine con mi novio y quiero empezar una carrera de modelo-

Mientras más hablaba más me aburría su conversación, pero lograba distraerme y en este momento es lo que buscaba. La noche transcurrió de la manera que esperaba, cenamos, bailamos y terminamos en la cama; Olivia fue buena elección para mí.

Al día siguiente mientras almorzabamos, me llegó el informe sobre Penélope y no había nada nuevo, ella seguía trabajando, yendo a su casa y caminando con sus auriculares conectados escuchando música, osea siendo tan ella.

-Bien olivia, te dejo en tu casa o en tu trabajo directamente?-
-En mi casa Millán, necesito cambiarme-
-En tu casa será-

Entre tanto trabajo no he podido estar muy al pendiente de Penélope, pero sé que está bien así que no me preocupo, Olivia lleva mensajeandome toda la mañana y aunque yo suponía que sería solo una noche, creo que podría darle más tiempo a esto.

***

Otra noche con Olivia en mi cama, yo me levanto a media noche y me detengo a observarla, es desde luego hermosa, me ha demostrado ser más inteligente de lo que suponía y sobre todo, sé que no existe nada más en su cabeza que el estar conmigo.

-Buenas días Millán-

Olivia se ha levantado de la cama y me ha buscado enseguida para besarme

-Buenas días Olivia-
-Me tomará un minuto desayunar ¿Me acercarías a la oficina?-

Estoy contestando algunos correos y cuando escucho eso de olivia se me ocurre ponerla a prueba

-Hoy no irás a trabajar-

De primera impresión olivia se queda callada pero casi de inmediato asiente a mi desición y me besa.

-A dónde iremos?-

Claro que ella quiere escuchar que iremos al Mall

-Yo saldré a otra reunión, tu te quedarás aquí y me cocinarás algo rico, volveré más tarde-

Esta chica se mira muy feliz de mi desición ¿Quién le ha robado la voluntad?

Permítame Disculparme (porque todos nos equivocamos) [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora