Extra: Sentimiento de Calor

8 1 1
                                    

He pasado 6 días viviendo con el amo, desde mi llegada me esforcé en mantener mi estadía.

No puedo negar que los primeros días hallan sido los más caóticos, pero siempre el amo ha venido a mi rescate, incluso cuando sale a estudiar aparece mágicamente, es simplemente genial.

Hoy es domingo y por lo que me ha contado el amo será su día libre, me esforzaré como agradecimiento por su hospitalidad.

Me desperté muy temprano e hice el desayuno hoy le pondría más esfuerzo, aunque lo poco que se de cocina sea freír y recalentar algunos ingredientes.

Miraba de reojo el cuarto del amo Sebastián, deseaba que no despertara aún y tenerle preparado su desayuno.

Pero hoy parece motivado y se despertó muy temprano.

—¡Buenos días Sebastián!

Estaba decepcionada pero no quería que el amo vea mi rostro así, tuve que fingir una sonrisa, por suerte el no lo noto.

—Buenos días, si deseas te puedo ayudar no quiero que quemes nuestros escasos recursos.

El amo no sonreía, él no está bromeando, pero yo ¿Qué hice mal? Hoy me esforcé.

—... Sebastián

quería preguntarle por mis errores pero me dio vergüenza y oculte mi rostro.

—Entiendo, supongo que lo tienes bajo control, bien hecho

Está feliz, ¡está feliz! el amo está feliz, estoy muy motivada que quiero llorar, pero el amo no puede verme así, aunque me duela tengo que darle la espalda.

Termine el desayuno no puedo decir que sea algo magnífico pero hoy le puse todo mi esfuerzo a este plato.

—y .¿Qué tal?

Realice mi pregunta diaria con mis expectativas altas.

—Podrías mejorar

El amo siempre ha sido una persona fría y respondía de la misma manera. Pero el era de cuerpo débil, mientras que sus palabras eran frías e hirientes, su cuerpo era sincero.

Mire su rostro bien y pude ver cómo sus mejillas se ponían rojas y de lado a lado sonrió, era la más linda que pude ver esa era mi calificación.

—jejeje

Solté una pequeña risilla sin darme cuenta.

El amo me miró un poco raro pero aún mantenía su sonrisa.

—Tengo algo en la cara o ¿Qué te sucede?

Aunque lo diga tan serio por dentro sé que está muy feliz.

—Cada día sonríes más.

El amo se tocó su rostro y se dio cuenta de la debilidad que tenía su cuerpo, estoy emocionada. Tenía varias ideas de lo que haría hoy para sorprender al amo pero.

—¡Ay!

Estaba tan emocionada que no tuve precaución y me corte.

—Déjame ver

Era un corte pequeño pero el amo insistió.

Tomo mi mano, era un poco vergonzoso quería saber lo que haría pero no quería asustarlo así que deje que hag...

—!!!

El amo Sebastián empezó a chupar mi dedo, se sentía raro pero aparte de eso era otra cosa lo que salía de mi cuerpo.

—Sebas ... Ah

Quería detenerlo ,mis dedos se sentían un poco entumecidos y mi cuerpo paralizado.

Empecé a sentir un cosquilleo y se sentía raro.

—...

Lo estaba haciendo muy fuerte y sentía que me quedaría sin sangre.

Él se acomodó al lado mío y toco minuciosamente cada parte de mis manos, sentía cosquillas pero todo eso no era nada comparado con mi dedo.

—Ah!, un momento por favor ¡ah!

No paraba, ya llegaría a mi limite, mis brazos y mi cuerpo se sentían cansados y yo muy caliente, hacia ruidos raros y no paraba de temblar, un cosquilleo en mi abdomen salió y se dirigió abajo ¿Quería ir al baño? No, era diferente.

Baje mi otro brazo por impulso y toque un poco mis piernas sin que se diera cuenta el amo. Bajaba más y más, pero se detuvo.

—¿Amo Sebastián?

Paro antes de que yo llegara completamente al límite.

—Te dije que solo, Sebastián

Me dio un beso en la frente

—Uh ,si

Mi cuerpo estaba agitado cuando se fue y mi corazón no paraba de latir.

Me quedé unos momentos sentada y no me di cuenta que el amo ya se había ido a su cuarto.

Inicie mis labores pero no podía dejar de pensar en estos sentimientos y torpemente limpie la cocina.

Sobre todo en lo que sentí cuando me dio el beso al final, al principio estaba muy caliente pero al final me dejó aturdida y feliz.

Es este el sentimiento que el amo Sebastián tanto habla.

El sentimiento de hogar que decía el, un sentimiento de calidez, eso que tanto extraña el amo y yo creo que lo tenía.

Yo quería compartir este sentimiento con el amo y poder calentar su frío corazón. Supongo que el siempre ha buscado este sentimiento para eso y yo me sentía egoísta por tenerlo solo para mí.

—Mina ven un momento a tu habitación

El amo me saco de mis pensamientos, parece que quiere algo pero ¿Mi cuarto? Otra vez el sentimiento salió y mi corazón latió incluso más fuerte.

Pero no quería más este sentimiento ya que yo no lo merecía, esto era del amo Sebastián y me centre en olvidar.

Aún estaba un poco aturdida pero debía completar mis deberes.

Yo procure que este sentimiento ya no se repita nunca más por mí bien y por el amo.

Caminos Entrelazados (En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora