Ian?

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NATALIA.

Seguía esperando en las sillas del pasillo, el reloj parecía no querer moverse y hacia dos horas que estaba allí, sin dejar de mover la pierna y cada vez estaba más nerviosa, y se me secaba la boca.
Maria había ido al baño un par de veces y justo ahora también estaba allí, .
Mis uñas habían acabado desapareciendo, y hasta estaba sudando y no si quiera era yo la que estaba apunto de sacar un bebe de su cuerpo.

-perdone...es usted familiar de alba reche no?- alce la cabeza y un médico me mirada desde arriba, sin apenas pestañear ya estaba de pie mirándole,  pidiendo todo tipo de respuestas.

-s-si soy yo,  saben algo?  Ya ha nacido? Esta bien? Ha habido complicaciones? -hice al menos quince millones de preguntas en un segundo pero el doctor de blanca barba me paro los pies.
- alba esta bien y estoy rgulloso de poder anunciarte que el parto ha sonido excelente y ha ido de maravilla,  se nos ha hecho un poco complicado a la hora de la cabeza pero es una chica fuerte.-me respondió con una sonrisa.
- puedo ir  verlos , porfavor déjeme pasar- mi cabeza se llenaba de imágenes de alba retorciéndose de dolor en casa, fue lo último que vi antes de que se la llevarán.

-claro, hace 10 minutos la pasaron a la habitación y creo que ya está con el niño,  se lo llevaron para limpiarlo y hacerle las pruebas,  pero ya lo tendra.
-muchísimas gracias enserio doctor...-enfoque mi vista en la chapita que decoraba su batalla con una cara sonriente donde se veía escrito el nombre de Jaime, -doctor Jaime,  gracias gracias.
-es mi trabajo no me las des.

Toque un par de veces en la puerta de la habitación, me temblaba el cuerpo entero , gire el pomo como si mi corazón fiera una bomba de relojería.
Mis dos pasos fueron suficientes para ver que alba estaba en la cama observando una pequeña cuna de cristal grueso con Ian dentro, y un body amarillo pastel puesto, mientras movía las manitas.

ALBA
mi mirada cambio de Ian a la puerta, Natalia estaba fija en el cuarto sin moverse, ni apartan la mirada de la cuna.
Sonreí y me mordi el labio.
No podía dedescribir lo que se siente al tener un hijo, simplemente no se puede,  es imposible, y no voy a ser yo quien intente explicar lo inexplicable.
-ey...Natalia - intente llamar su atención y lo consegui.  Giro la  cabeza y me miró,  pasaron unos segundos Hasta que sonrió y se acercó a la cama rápido para sentarse al borde , a mi lado.

Se acercó y me dio un beso en la frente, muy despacio mientras yo cerraba los ojos.
Volvió mirar a Ian y de le aguaron loa ojos.
- no llores porfavor...
Empezó a llorar.
- ay joder alba es guapisimo.
Dijo riendo, mientras las lagrimas molaban su cara .
-cogelo,-le invite
Giro bruscamente la cabeza y negó con los ojos muy abiertos.
-no no no no que dices, no se coger un bebe, se me va a caer y no no no .
-Natalia te quires callar?- intente tranquilizarla y me reincorpore un poco.
-acércate y ponle las manos rodeandole bien, y luego te vuelves a sentar.

Natalia no volvió a negarse pero se movía tímida.
Se quedó frente a la cuna y se agachó.
-Ian,  no te muevas mucho, no quiero que te caigas porque  me muero , te queda claro?- le hablo al bebé como si le fuera a entender y apuntandolo con el dedo.
Ian no respondió,  obviamente no lo iba ha hacer pero the río y agarro el dedo de natalia con su pequeña manita.
Yo sonreí por inercia.
Natalia se mordía el labio intentando no llorar otra vez y con la otra mano todo la punta de su nariz.
-vamos guapo.- coloco sus manos debajo de el y lo levanto con cuidado.
- no lo haces tan mal - le dije sonriendo mientras se sentaba.
-no he leído suficientes libros alba.
Rei y acaricie la cabeza de Ian.
-nat, te has leído dos bibliotecas enteras, no tienes que leer nada .
Resoplo y beso la cabeza del niño y arrastró su nariz despacio por ella.
Me veis? Estoy muerta,  muerta de puta ternura y amor y todo.

-tiene tus ojos,  son preciosos. - Ian estaba dormido en mi pecho y natalia estaba a mi lado acariciando mi mano.
-tiene el pelo negro, ya tiene algo parecido a las dos- no tuve tiempo de decir más porque de abalanzó como un huracán a mi boca, con cuidado de no dar a Ian.

Ian, tenia mis ojos, un poco más claros , pero enormes, el poco pelo que tenia era negro, y todo el en si era monisimo.
Sólo podía imaginarme a natalia meciendo al niño de un lado a otro y tratando de que se durmiera, era ver otra faceta totalmente diferente suya, totalmente nueva, pero que me daba el presentimiento de que una a ser una de mis favoritas.

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SIENTO HABER DESAPARECIDO,  PERDONADME💖

Creo que ya me tienesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora