Adicta.

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Necesitaba decirte por una vez en mi vida cómo me hacías sentir, necesitaba que supieras lo bonito que era, lo maravilloso que habías hecho en mi vida. Pero más que nada te necesitaba a ti, necesitaba tus manos, tus besos , las tiernas palabras que me hacían creer en ti, te necesitaba a ti, porque lo único que quería eras tú.

Pero más mucho más que todo eso me necesitaba a mí, necesitaba a alguien que me cuidara y que me hiciera feliz siempre no solo por ratos, necesitaba algo más que tiernas palabras, necesitaba una vida, un amor, y tú nunca pudiste dármelo.

Necesito lo que me dabas, pero a la vez necesito mucho más, porque sé que puedes dar más de lo que haces.

Más que una necesidad era un deseo de poder ser feliz, pero completamente y si todavía después de esto no estás dispuesto a darme esa felicidad las puertas están abiertas y la despedida lista para ti.