Capítulo IV : Por imbécil

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Llamó un par de veces, y le abrió Ginevra. Al parecer estaba bastante enfadada. Aiden la sujetó del brazo.

-¿Qué ocurre, Gyna? - Preguntó con toda la dulzura que pudo.

- Nada que te importe. Suéltame.

Collins sólo afianzó el agarre.

-¿Qué ocurre?

Ginevra se soltó bruscamente. Le mostró una foto. Eran él y Katlyn, la madre de Cristopher, abrazados el día de su graduación de la universidad.

- Me dijiste que me amabas... - Una lágrima resbaló por su mejilla.

- Fue hace años, amor. No significa nada para mí.

La mano de la mujer se estampó con fuerza en su mejilla.

- Por imbécil- Masculló

Aiden se frotó la cara. Auch.

Entró en la oficina, no muy seguro de qué le había hecho a la vida para que lo tratara así.

Se inclinó respetuosamente ante el experimentado y demente científico.

- Doctor Moore.

- Doctor Collins- Se saludaron.

No pudieron decir nada más, porque un jovencísimo chico asiático entró por la puerta. Hizo una breve reverencia. Tras él, venían varios agentes de seguridad.

-Doctor Moore, desaloje, por favor. - Dijo un encargado de seguridad.-

-¿Disculpe?

- Está usted en la oficina del doctor Kim.

- No, este es mi despacho.

- El gobierno ha ascendido al Doctor Kim. Mucho me temo que debo pedirle que se retire.

Moore empezó a quejarse, pero un segurata lo empujó fuera de la oficina.

Iban a echar a Aiden también pero Kim los detuvo.

- Dejadnos. - Ordenó. A pesar de su corta edad, Kim tenía un voz grave, imponente y autoritaria.

Sus ojos almendrados relucían, mirando a su alrededor.

Aiden miró la hermosa cara del menor. Su piel era simplemente perfecta. Una peca adornaba su mejilla, justo al lado de su nariz. Las comisuras de sus abultados labios formaban una línea recta.

Su pelo teñido de gris estaba peinado cuidadosamente, y sus anchos hombros formaban un ángulo recto con su cuello.

El chico irradiaba una especie de aura, hasta Aiden se sentía poca cosa a comparación de ese chaval de trece años. ¡Trece años! Sus superiores ya le habían avisado de su juventud, pero pensaba que hablaban de unos veinte.

Collins se inclinó.

-¿Sabe quién soy? - Preguntó Kim. El adulto asintió- Excelente – Sonrió de manera malévola.



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Los capítulos son muy cortos, pero es por que me cuesta mucho escribir historias 100% originales.

Espero que me entendáis, y si no entendéis algo, habladme por privado y os resolveré las dudas



Gracias por leer .



Bye!


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⏰ Last updated: Jun 14, 2019 ⏰

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