Entre el odio y el amor

Capítulo 9 "Salvando al soldado Ackerman"

Pasaron dos miserables horas en espera de que me sacarán como fuera de la habitación de Mikasa pero ni un sólo rayo de esperanza para mí.

-¿Qué he hecho para merecer esto?

Seguí llamando a Hange pero su teléfono estaba apagado, no sabía a quien más pedirle ayuda sino a él o ella, no sé que sea 

En el suelo y resignado en hundirme en el infierno de tonos pastel de Mikasa volví a mi investigación. Me equivoqué, no había nada debajo de la cama sólo un poco de polvo.

A la hora siguiente mi demencia por estar ahí encerrado y con la presión sobre el pecho porque en cualquier momento llegaría ella aumento.

-Tsk... estoy aburrido.

Me levanté y subí a la cama para saltar, era estúpido pero al menos así me distraje, en mi imaginación pensaba. -Esta es Mikasa y la estoy pisoteando. Salto sobre Mikasa-.

Luego me caí y me arrastré por el piso para seguir viendo sus cosas.

-¡La tarea!

Al ver sus notas recordé que tenemos que hacer un ensayo de 2500 palabras.

Hange contesta por lo que más quieras... ya, ya, ya...

¿Qué pasa Levi?

¿Por qué no respondes?

Estaba haciendo el ensayo... y...

No importa. Hange estoy en un problema muy grave.

¿Ahora qué hiciste?

Estoy encerrado en la habitación de Mikasa, no puedo salir y ella volverá en cualquier momento.

¿Cómo te metiste ahí?

Larga historia, te contaré después pero sácame de aquí.

Te dije que ibas a terminar mal.

Me regañas cuando me saques de aquí. Por favor... ayúdame.

Está bien pero ¿Cómo se supone que voy a sacarte de ahí?

Ven a mi edificio, el departamento de Mikasa está en mismo piso que el mío, es el E9 pero trae a un cerrajero o si encuentras a Mikasa quítale la llave... no los sé.

Enano te has metido en un gran problema. Espera un poco, veré que puedo hacer.

Cuento contigo, gracias.

Estaba confiado en que Hange me salvaría de la fatal situación en la que me había metido, después de horas por fin respiraba en paz pero fue mala idea confiar en Hange, la situación se puso peor una hora más tarde.

No sólo había venido Hange, sino que venía con Mikasa y el resto de sus amigas. Ellas tenían una reunión y yo abajo de la cama siendo torturado por sus charlas y risas.

Pensaba escribirle un texto a Hange cuando me llegó el suyo.

Lo siento, enanin. Tuve que traerla de vuelta pero no te preocupes es parte del plan ;v