Mi Dobe

Capítulo Único: Una Copa.

Naruto Namikaze se encontraba como todas las noches, durmiendo. Era su pasión, le encantaba dormir, si le pagarán por dormir, invertiría en una compañía de camas. El punto era que su sueño era sagrado. Su celular sonó, despertándolo de su hermoso sueño.

-Mierda.. -se quejó, buscando su celular sin levantarse de la cama. Contestó- Naruto Namikaze, ¿qué necesitas?

-Naruto, es Sasuke. Necesito que vengas a la oficina ahora mismo. -dijo con un tono menos cortante de lo usual.

-Estaré ahí en.. -se estaba quedando dormido.

-¿En? -insistió al otro lado.

-Oh, quince minutos. -finalizó somnoliento.

-Más te vale. -cortó la llamada.

-En quince minutos.. -repitió pero luego despertó completamente- mierda, ¿dije quince minutos?

Naruto corrió de una esquina a la otra de su habitación, en pánico. Pero luego se tranquilizó y lamentó sus palabras. Rapidamente, se cepilló sus dientes y lavó su cara. Con un poco de sueño, se cambió de ropa. Agarró sus llaves y cartera antes de salir de su apartamento.

✿ ✿ ✿

Sasuke Uchiha ya iba por la séptima copa de vino tinto. Una botella yacía vacía en el suelo mientras que cuatro más seguían dentro de su cajeta original y una en su mano. Mantenía sus ojos cerrados, seguía sobrio.

-Sasuke-san, ha llegado Naruto-san. -indicó su ayudante.

-Déjalo pasar. -accedió sin abrir sus ojos.

-Eh.. Sasuke-san, ¿qué necesitas? -dudó un poco sus palabras.

-Llegas cinco minutos tarde. -dijo abriendo sus ojos.

-Lo lamento, hubo un retraso. -se excusó, pero luego notó las botellas de vino- ¿Ha estado bebiendo?

-Siéntate. -indicó, señalando su lado.

-Pe-pero.. -lo miró con seriedad- no estás bien.

-¿Podrías sentarte, Naru? -pidió casi con desespero.

Sin nada más que decir, se sentó al lado de su jefe. Estaba confundido pero a la vez preocupado por él. Estar a su lado no le incomodaba, hasta aquella mañana. Había visto como él, su amado, besaba a otra persona. Le dolió a decir verdad, pero no podía reclamarle, él no era nada para Sasuke.

-Perdón. -dijo el azabache- Naru, lo lamento tanto..

-¿Por qué? -miró a su jefe, quien lo miraba.

-Debí saber que lo mal interpretarías.. -su mano acarició su mejilla- debí saberlo..

-¿De qué hablas? -preguntó con cierta frialdad.

-De Ino, joder. -retiró sus manos con brusquedad- Lo viste, te vi pero no salí detrás de ti. Deje que lo malinterpretases como siempre haces. -lo miró con tristeza- Naru, eso fue un accidente.

-No tienes porque mentir. -dijo con una leve sonrisa.

-Naru, daré todo lo que sea. -tomó sus manos- Todo, lo que quieras o lo que quieran. -acercó su rostro al suyo- Con tal de que me perdones.

-Un aumento. -dijo de inmediato.

-¿Qué? -arqueó su ceja.

-Quiero un aumento. -dijo con una sonrisa.

-Entiendo, un aumento. -sonrió levemente.

-Gracias. -se abalanzó encima del Uchiha con un abrazo.

Sasuke tomó su cintura mientras Naruto reía feliz encima suyo. Sonrió, era tan satisfactorio verlo reír, ver a su dobe reír lo hacía feliz. Besó su frente, como acostumbraba hacerlo desde hace unos meses.

-Naru, quiero decirte que.. -su sonrisa se alargó- leí tú carta.

-¡¿Mi carta?! -se exaltó- dime que es broma.

-No, dobe, es verdad. -se levantó con el rubio en sus piernas- Tú caligrafía es.. especial. Ya entiendo porque prefieres imprimir.

-¡Olvídalo! -apresuró en decir- ¡olvida lo que leíste!

-¿Por qué? -sonrió travioso- me gusta lo que leí.

-Que vergüenza.. -escondió su rostro en sus manos.

-Te amo mucho más de lo que crees, dobe. -Confesó. Apartó la manos del rubio- Solo que no te das cuenta.

Naruto terminó rindiéndose en el cálido pecho de su jefe. Debió traer su chaqueta, tenía frío. Sasuke lo miraba con ternura, era tan lindo, parecía un gatito escondiéndose del frío.

-¿Quieres hacer lo nuestro oficial? -preguntó, tomándolo de sus caderas.

Asintió sin levantar su cabeza. Con cuidado, alzó la cabeza de su amado y sonrió al ver lo sonrojado que estaba. Besó la comisura de los labios del rubio antes de preguntarle:

-¿Quieres vino?

-Sí. -contestó con una sonrisa.

Se levantó de encima del Uchiha para que le sirviera una copa de vino tinto. Sasuke le ofreció la copa con una sonrisa y el la aceptó con otra. Hizo un gesto, diciendo que la bebieran hasta el fondo. El Uchiha fue el primero en acabar. Segundos después, el rubio.

Bebieron de copa en copa, con sonrisas, risas, hablando de cosas casi sin sentido. Acabaron con dos botellas más, el conteo había sido olvidado y ambos yacían casi inconscientes en el sofá.

-Te amo mucho. -soltó Naruto- Mucho, Sasuke.

-Yo también, Naru. -besó su frente- Duerme bien.

Ambos se durmieron en el sofá. Sasuke envolvió a su amado en sus brazos, tal y como había deseado por los últimos meses. Aquel chico, Naruto Namikaze, era en serio alguien a quien amaba. Su dobe.