Querido papá:
Hace bastante tiempo que ya no nos vemos, no se ni si quiera si te acordarás de mi existencia.
Sé perfectamente que nunca vas a leer esto, sé que no te importo,pero me da igual, voy a explicarte todos los sentimientos, ahora es tu decisión terminar de leerla o no. Necesito poder descargar toda la rabia que llevo dentro y han sido once años, los cuales, no he podido hacerlo, y ya va siendo hora.
Aún recuerdo el día de tu partida, cuando le dijiste a mamá todas esas cosas tan feas, a mi también me dolieron, y demasiado. Fueron palabras tan feas, que se me eriza la piel de tan solo pensarlo.
Durante los ocho primero años de mi vida, tu fuiste uno de mis pilares fundamentales, una persona muy importante, pues eras mi padre. Pero durante los once siguientes, solo te tengo rencor y un poco de odio, pero lo veo normal.
Me abandonaste, no estuviste conmigo el día de mi graduación escolar, no estuviste conmigo cuando rompí con mi primera novia, no estuviste conmigo el día que gané el premio de literatura, no estuviste conmigo cuando cumplí dieciocho para felicitarme la mayoría de edad, no llamaste cuando enfermaba, no llamaste para felicitarme los cumpleaños, al parecer no te importaba que yo llevara sangre tuya.
Al día de hoy, solo quería decirte que no me importa lo orgulloso o no que tu estés de mí, la verdad no me importa y nunca me importara.
Solo quería despedirme, quiero dejar las cosas claras antes de irme.
Quería decirte que mamá me dijo dónde vivías, que tenías otra mujer y otra hija, la cual se ha convertido en tu razón de vivir y por la cual haces hasta lo imposible.
No son celos, es rencor. Rencor porque jamás comprendí que había hecho para que no vinieras a visitarme, porque te llamaba desde el teléfono de mamá y jamás contestabas. Simplemente nos volviste invisibles y te olvidaste de nosotros. Olvidaste que tenías a una familia, una que te quería sobre todas las cosas y que estaría dispuesta a dar todo por ti.
Nunca comprenderé cual fue el mal que nosotros hicimos para que de un día para otros, te olvidaras de nosotros, ¿Cómo le explicas a un niño de 8 años que su padre odia a su madre, y que en parte, también lo odia a él por existir? No le deseo ese sentimiento de abandono a nadie, ni siquiera todas esas personas que a lo largo de la vida, me han hecho un daño atroz.
No me arrepiento de que seas mi padre, pero si hubiera tenido elección, la verdad no querría que volvieras a ser uno de mis progenitores. En otra vida, si me dieran la oportunidad de elegir quienes fueran mis padres, volvería a elegir a la misma madre, pero no al mismo padre. Elegiría a un hombre bueno, que quiera a mi mamá, que me quiera a mi, que no me abandone, que esté conmigo el día de mi graduación escolar, el día que rompa con mi primera novia, el día que gane algún premio, que me felicite los dieciocho años y que sobre todo, cuide a mamá, para que ella, esté conmigo siempre.
Gracias por esos primeros ocho años de mi vida, pero ya no te agradezco nada más. Lo siento.
Tanto silencio, me llevó a la locura, y la locura más allá...
Ahora que me he hecho ver en tu vida, por favor, nunca nos olvides, ni a mí, ni a mamá.
Con cariño y una pizca de odio
Marc
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Nunca te olvides de que existo
Novela JuvenilEl silencio me llevó a la locura, y la locura más allá Marc, un joven de 19 años, decide terminar con su vida tras largos años de sufrimiento, pero antes de hacerlo, quiere despedirse de las personas que alguna vez fueron importantes en su vida, dej...