Louis.

Track 5

Después de lo sucedido en la pizzeria, nadie había hablado de eso, por lo menos no con Harry y tampoco con Louis.

Este último sintio que habia sido mas duro de lo normal, pero es que Harry no reaccionaba con nada de lo que le dijeran, ahora ya había cesado de llorar en público, pero pocas veces se aparecía en sus reuniones, seguramente porque se sentia odiado por ellos. No era nada más que su culpa y debía arreglarlo, lo haría esa tarde en la reunión, no solía asistir a estas pero era la mejor ocasión para redimirse.

"Ya están en la fiesta." escribió el mensaje de texto para Niall que rápidamente respondió: "Acabamos de llegar Liam y yo, te salvaste de Harry ;)" Louis podía sentir el sarcasmo de Niall tan latente pero el pequeño emoticono le quedaba claro y como era que estaba en problemas, quizá no tan graves pero si que le confirmaban que era un maldito.

Bloqueo su celular y camino al departamento de Harry, honestamente no sabía si era buena idea, pero lo que si sabia es que Harry lo merecía, aún recuerda como sus ojitos de rana se ensancharon y vio   en ellas cuando le hablo de aquella forma, era verdad que le irritaba pero nadie merecía sentirse de aquella forma, además eso no ayudaba a que Louis cumpliera lo que deseaba.

Toco la puerta y se planteó el irse, de hecho no toco mas, estaba por irse cuando la puerta se abrió. Se encontró con un Harry de ojos llorosos, carita hinchada y la nariz roja como Rodolfo, Louis fruncio el ceño, Nicholas seguía afectandolo igual, pudo ver una ligera mueca en el rostro de Harry y trato de suavizarse.

- Vine para que vayamos a la fiesta -dijo cruzándose brazos sobre su pecho. Okay no había sido tan suave, pero apenas estaba probando, ¿de acuerdo?

Harry lo miró confundido antes de negar.- No iré.

Louis lo evaluó por unos segundos, seguía en pijamas, comprendió lo que era sentirse así, él había estado así en Donny alguna vez. - Harry...

- Estoy viendo una película y de verdad quiero verla -pudo ver lo avergonzado que se sentía- , por eso no podré ir.-aunque enseguida ya no hubo vergüenza sino que pudo ser una mirada amenazante para Louis, de no ser porque este tenía una cara demasiado tierna.

- Esta bien, me quedo entonces contigo, podemos pedir algo para comer.

Con el ceño aún fruncido camino al interior directo hacia el sofá donde encontró una almohada con un suéter que había visto en alguien más, Louis la miró y terminó por aventarla desdeñosamente lejos de ahí.

Sintió la mirada de Harry por unos minutos pero no dijo nada, hasta que este se sentó a su lado y sugirió algo para comer, fue que Louis habló nuevamente.