MY LITTLE SWEETBOY ━ stony au

F i v e

Muchas cosas habían pasado a través de los años en esa casa llena de Stark's, primero Maria la madre de su Tony, se dio cuenta de la relación secreta que el nombrado y Rogers tenían, ya que los descubrió besándose mientras estaban en el taller, fue difícil de explicarlo, pero la mujer entendió, ella les prometió que charlaría con Howard al respecto para que fuera más fácil para ellos decirle, cosa que resultó increíblemente fácil, al principio Howard Stark pareció negarse a todo, incluso quiso golpear a Steve por meterse con su pequeño hijo, pero al ver la mirada de amor que Tony le brindaba a este, pudo comprender que aunque el los separará ellos iban a luchar a capa y espada por estar juntos, y no tuvo otra más que aceptar este nuevo cambio, que con los años terminó de aceptar y ser un suegro feliz, ya que si hijo estaba con el amor de su vida, incluso si este era hombre. 

Después comenzaron aquellos acontecimientos que Steve poco a poco lograba reconocer, estaba dispuesto a encontrar a Bucky antes de que el accidente con los padres de su amado llegará, y así fue, un poco tarde ya que Barnes estaba en manos de Hydra y ya comenzaba a ser controlado, pero pudo llegar a el antes de tiempo, lo llevó a S.H.I.E.L.D para que fuera rehabilitado, y pasó lo inimaginable, el y Romanoff, cayeron profundamente enamorados, Steve se dio cuenta que alteró varios sucesos, pero era por un bien.

Cuando Tony tuvo su cumpleaños número 23, fueron de viaje a Paris ya que según Steve era el mejor lugar para hacerle la propuesta más importante de su vida, y así fue, Rogers le propuso matrimonio al amor de su vida, el cual con ojos llenos de lagrimas y una enorme sonrisa le dio un sí.

Y así fue, comenzaron los preparativos de la boda más esperada, Tony, Pepper y Maria eran los más emocionados, obviamente debían festejarlo como tal.

Día de la boda

— Hey Punk, ¿Nervioso?— Entró Bucky con un traje azul marino observando como el rubio terminaba de alistarse.— Wow, nunca creí poder presenciar esto.— Soltó divertido.

— Si lo estoy, pero estoy más feliz, ¿Sabes? Siempre pensé que este día sería muy lejano, cuando apenas era un adolescente.— "O en mi linea de tiempo original, donde no pude confesarle lo que sentía a Tony", pensó Rogers, pero justo ahora, este momento, era algo preciado, ya que por fin estaba viviendo lo que quería, lo que debía haber hecho en su linea de tiempo.— Pero, ahora estaré a lado de Tony, y ese es el regalo más grande.

— Eso es hermoso, pero lamento cortar tu inspiración, ya es hora amigo.

Steve sonrió y bajó las escaleras junto a su mejor amigo, la ceremonia sería en el gran jardín de la mansión Stark, al bajar, se encaminó al altar junto a su amigo, al llegar Bucky le deseó suerte y se sentó a lado de su amada pelirroja, se podían observar a varios conocidos, su suegra, Natasha y Bucky, Rhodey, Nick Fury y a su derecha la agente Hill, invitados de Natasha, ya que aun faltaba mucho tiempo para entrar al proyecto de los Vengadores, a los pocos segundos la melodía de que la boda iniciaba se hizo presente, y ahí comenzó sus nervios, alegría y todos los sentimientos de felicidad mezclarse dentro del Capitán, fijo su mirada a las dos personas acercándose a la alfombra, y ahí estaba Tony, con un hermoso traje de color blanco con detalles rojos y dorados, a lado de su padre con una gran sonrisa y ojos llenos de lagrimas, las personas presentes comenzaron a levantarse aplaudiendo, Tony brindaba sonrisas, y ahí estaba Steve viéndolo atentamente, pensando en cuan perfecto podría llegar a verse, Howard dejó a su hijo en el altar no sin antes decirle a Steve que lo cuidará muy bien, y darle un abrazo, después de eso el rubio le tendió su mano a su futuro esposo y le sonrió con lágrimas en sus ojos, estaban muy feliz, comenzó la ceremonia, Pepper fue a entregar los anillos  y llegó la parte de los votos matrimoniales.

— Bueno, hace muchos años.— Comenzó el castaño con sus votos, mientras tomaba el anillo que su amiga le llevó.— Conocí al hombre perfecto, ese que parece príncipe de cuentos, jodidamente perfecto y caballeroso.— Steve rió y le susurró un "Lenguaje", al igual que el juez carraspeó.— El punto es, que cuando te vi por primera vez, sabía que tu eras el que me cambiaría la vida por completo, sacaste de mi cosas que ni siquiera sabía que tenía, me salvaste, me enseñaste a amar la vida, y lo hice más estando contigo.— Sonrió observando por un momento a los invitados, regresando su mirada a los ojos azules que tanto amaba.—Eres una luz que llegó de repente, haces que mis días sean de lo mejor, gracias a que estas conmigo, y estoy feliz con eso, te amo Steve, cada mañana estaré agradecido de poder ver tu rostro y decirlo cuantas veces pueda, y ten por seguro, que siempre lo haré.