CHAPTER 5: Quinta ronda KO!

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Las vacaciones de verano significaban muchas cosas para Itsuka. La mayoría de ellos eran aburridos. Significaba despertarse temprano con su padre para ver el amanecer, significaba hacer quehaceres, hacer un entrenamiento extra, aburrirse de su mente cuando el calor del verano la asfixiaba. También significaba desear tener un grupo cercano de amigos para invitarla a hacer cosas.

O para que ella invite a hacer cosas.

No era que fuera una marginada, sino que simplemente no pertenecía a ningún grupo. La mayoría de las veces no era un gran problema, normalmente estaba ocupada con el Dojo, el trabajo escolar o varias otras cosas. Apestaba cuando tenía tiempo libre, como ahora.

Tal vez debería ver si Izuku era libre de hacer algo. Suponiendo que incluso pudiera permanecer derecho el tiempo suficiente para hacer cualquier cosa. Incluso sin la "motivación extra" que su padre quería usar, todavía estaba entrenando una cantidad increíble y estaba cansado constantemente. Ella le preguntará cuando lo vea a continuación, él merecía al menos algún tipo de descanso.

Antes de entrenarse en el hospital, a este ritmo, estaría demasiado cansado para aprender las artes marciales para usar en ese torneo en el que su padre las inscribió.

Apretando sus zapatos y revisando su teléfono por última vez (sorpresa, sin mensajes) encendió su música y ajustó su equipo de carrera. Esta era la primera vez que salía antes de las seis para correr, pero era la mejor manera de combatir el calor y salir de la casa y el dojo.

Eso y no le costó dinero.

"¡Bueno!" Ella llamó, mirando hacia atrás, medio esperando que su padre se asomara detrás de ella con una especie de tarea para ella. Él no estaba allí, podría no haber estado al alcance del oído. "¡Me voy por un momento! ¡Te veré más tarde!"

"¿Oh?" Su padre asomó la cabeza desde la esquina, su bigote de sal y pimienta estaba salvaje esta mañana, y su pelo negro caía libremente sobre su hombro. "¿A dónde vas?"

"Solo una carrera", sonrió ella saltando de un pie al otro. Estos nuevos zapatos se sintieron muy bien "Creo que me iré a la playa un poco, ¡volveré a tiempo para la clase!"

Tenía una mano en la puerta antes de que su padre pudiera intentar detenerla o algo peor. Únete a ella

"¡Bye nos vemos!" La puerta se cerró de golpe detrás de ella y ella golpeó el suelo corriendo, despejando los tres pasos que conducían al dojo con facilidad. Normalmente, se dirigía a la izquierda para tomar el tren y se dirigía a su escuela, en cambio, iba a la derecha y se adentraba en la prefectura de Musutafu.

Desde allí, había una milla de carreteras secundarias hasta que llegó a un río del que no sabía cómo se llamaba, a pesar de rodar en sus orillas artificiales como niña varias veces, luego lo seguiría río abajo hasta que encontrara la playa. Una vez en la playa, se dirigía de nuevo a la derecha, recorriendo el camino que se extendía hasta el siguiente río. Probablemente se daría la vuelta una vez que llegara a esa playa que básicamente se había convertido en un depósito de chatarra.

Encontrar su paso fue la parte más difícil de correr, ir lo suficientemente rápido como para sentir la quemadura, para llegar a la altura de un corredor sin agotarse. Ella siempre quiso ir a toda velocidad, cargar hasta el final, incluso si hacerlo así la dejaría jadeando por respirar a mitad de camino. ¡Esa fue la única razón por la que ella no entró primero en los exámenes físicos este año!

"¡Gah!" Ella medio jadeó, medio gritó, giró a la izquierda en el río y lo siguió río abajo. Su velocidad aumentaba y miraba hacia adelante, su aliento llegaba con cada paso para empujarla hacia adelante. Es probable que Izuku estuviera ahí fuera dando todo para que pudiera ingresar a la UA sin ninguna peculiaridad. Y ella solo tomaba las cosas al mismo ritmo que siempre había hecho.

Puño a puño, de corazón a corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora