Puño a puño, de corazón a corazón

CHAPTER 3: Tercera Pelea

Los viernes debían ser divertidos, emocionantes y el momento perfecto para que ella se relajara. Ella no tenía entrenamiento, sus dos amigas estaban ocupadas con cosas de la familia y, por algún milagro, solo tenía una hora de tarea, lo que la dejaba en el raro estado de no tener absolutamente nada que hacer. La culpa, tan oportunista como siempre, consideraba oportuno llenar ese vacío.

Ella sabía que lo que decía era la verdad. Pero ella no tenía que decirle eso. Ella no tenía que decirlo. Él sabía mejor que nadie. Todo lo que ella hizo fue patearlo mientras estaba abajo. Estaba seguro de que había algo que podía hacer en la U.A. Incluso tenían cursos de negocios y generales, seguro que esos cursos eran para personas que querían una licencia para usar su peculiaridad, pero tenía que haber algo para él.

"Gah", se rascó a un lado de la cabeza tratando de sacar este molesto pensamiento de allí. Ella no tenía una manera de hablar con Izuku hasta el entrenamiento del sábado. Ella se disculparía con él. Fue así de simple. Y Tokio era una ciudad grande, simplemente no había manera de que ella pudiera chocar con él al azar simplemente deambulando.

Dándose una palmada en las mejillas, sonrió y respiró hondo. No había nada que pudiera hacer en este momento, así que también podría intentar divertirse. Con estar aburrido. "¿Dónde estoy de todos modos?"

Una concurrida calle de mercado se extendía frente a ella, había estado allí varias veces con sus amigos, realmente no había mucho interés allí. "¿Tal vez un poco de café?"

También podía ir de compras de la ventana y mirar algunas chaquetas de cuero para cuando obtuvo su licencia de motocicleta. Solo unos años más. Y convencer a su padre de que la deje obtener uno, pero eso no debería ser un gran problema si obtuvo buenas calificaciones y se metió en la U.A.

La acera se sacudió bajo sus pies cuando el trueno la rugía, aturdiéndola por un segundo antes de volverse hacia su fuente. El humo se elevó hacia el cielo azul claro, su base está teñida de naranja por las llamas. Se produjo otra explosión, esta casi enviándola al suelo.

El pánico se extendió como un reguero de pólvora. La gente huyó de la explosión, mientras que otros, sobre todo héroes, corrieron hacia ella. Ella no era una heroína, aún no, no debería apresurarse hacia el peligro, solo podría empeorar las cosas. Ella debería dejar que los profesionales lo manejen.

¡Pero luego se perdería la oportunidad de ver a algunos profesionales en el trabajo! ¡O tal vez había algo que ella pudiera hacer!

Ella siguió a la multitud hacia la explosión.

Una multitud reunida en la entrada, algunos héroes profesionales y policías estaban bloqueando la entrada de civiles. Ella reconoció a algunos de ellos con la talla de Mt. La dama que se avecina en la distancia no puede entrar en el estrecho distrito comercial y en los bosques de Kamui que intentan rescatar a las personas del fuego, e incluso los Brazos de la Muerte que luchan contra lo que parecen ser aguas residuales líquidas que se están volviendo locas.

Los lodos giraron hacia atrás, vio una cara y un ojo en algún lugar en esa masa de goo. Eso no era solo la peculiaridad de alguien. Eso era alguien. La idea de tener una peculiaridad que la convertiría en una pila de lodos vivos la hizo marearse. No es de extrañar que el tipo fuera un villano.

"¡No es bueno!" Escuchó a un héroe decir, era imposible decir cuál de ellos, ya que toda la línea de ellos se retiró. "Parece que no puedo controlarlo y ha tomado a un estudiante con una poderosa rehén, las explosiones hacen que sea difícil llegar a él".

¿Había un estudiante en algún lugar dentro de eso? Esta vez, otra serie de explosiones estalló y expulsó parte del fango y, por un instante, vio la mano del niño que estaba atrapado dentro de allí. ¿Qué demonios estaba pasando? ¿Cómo estaba luchando tanto? Cuando los héroes dijeron que tenía una fuerte peculiaridad, no estaban bromeando.