Seguir [Raptorgamer]

G

Tras unos cuantos días, Mike mejoró. Sparta termino herido, tal como se lo advertí.
Pero comenzó una relación con Muzi.

Los cuatro nos organizamos para ir a la fiesta de graduación, Muzi y yo creímos que eso ayudaría a despejar las mentes de Sparta y Mike.

Yo fui por Mike esa noche, al llegar ví a sus padres, de mala gana le hablaron a Mike.

El salió seguido de su hermana que rápido nos tomo unas cuantas fotos, me causo risa esa situación ya que normalmente es la madre la que siempre quiere una foto así de sus hijos.

Al subir a mi auto, Mike se despedía de su hermana por la ventana, hablamos de cosas triviales y cantabamos una que otra canción de la radio.

Vi los antebrazos de Mike. Hacia poco habíamos descubierto cicatrices, afortunadamente mientras estaba enfermo Sparta y yo tiramos todo con lo que se pudiera dañar y entre eso una caja llena de navajas que tenía guardada bajo su cama. Estaban oxidadas.

Mike nos prometió que no lo volvería a hacer y para comprobarnoslo comenzó a reemangarse  cualquier prenda.

Vi sus facciones, Mike se estaba muriendo lentamente, ya no dormía, cada vez comía menos, no sabía si seguía consumiendo esas pastillas y justo bajo sus ojos se comenzaban a notar leves marcas de tanto llanto.

Aún así, el parecía estar mejorando sentimentalmente. Yo me encargaría de cuidarlo mejor en cuanto nos mudaramos. Habíamos acordado con Rosdri que Mike y yo nos iríamos el domingo después de dejar a Sparta y a Muzi en el aeropuerto; principalmente para seguir el plan de Mike.

Hablando de los reyes de roma, llegaron a la fiesta justo en nuestro pequeño debate entre Mike y yo sobre el ponche misterioso.

Hablamos durante un largo rato, hasta que en un pequeño momento Mike y yo nos separamos un poco de la pareja.

En el lugar una canción algo movida comenzó a sonar, adoraba esa canción, recuerdo que la conocí junto a Itzel y nos la dedicamos mutuamente... Cerré los ojos recordando a mi bella princesa.

Una sonrisa se forjó en mi rostro involuntariamente.

–Trolli quería bailar conmigo está canción...—dijo Mike en voz baja, al mirarlo tenía una sonrisa algo melancólica.

Fue cuando obtuve respuestas a todas mis dudas, Itzel fue quien me la dió. Vi a Mike y era como estar junto a Itzel pero... Comprendía perfectamente que Mike no era ella.

Lo tome de la mano y lo jale levemente hacia la pista. Él me miró extrañado pero aún con una pequeña sonrisa.

Comenzamos a bailar a tope. Escuchaba su risa y ver su sonrisa me hacía feliz. A lo lejos ví a Sparta con Muzi de igual manera y sentí que todos los problemas desaparecían.

Ellos eran felices. Y eso me hacía sentir paz.

Bailamos por otro rato, el ponche hizo su efecto así que deje a Mike por un momento.

"Volveré pronto"—le dije y él asintió sonriente.

Me tarde solo unos minutos pero al regresar Sparta llegó junto a Muzi, ambos muy sorprendidos.

–¿Dónde estabas?—preguntó Sparta, juraría que nervioso.

–en el baño, ¿porqué?

–Trollino llegó a la fiesta y acaba de salir con Mike y Ela al patio.—siguió Muzi

–Mike se veía... mal.

Vimos a Ela entrar por su bolso, la chica se limpiaba las mejillas y Trolli detrás hacia lo mismo. Se abrazaron y antes de que se fueran corrí a ellos siendo seguido de los castaños.

–¡Javier!

Él me miró extrañado pero aún con esa actitud decaída.

–¿Y Mike? ¿Qué pasó?

–...Mike terminó conmigo...—suspiró.

–lo hizo para que Trolli y yo estuviéramos juntos, intentamos hablar con él pero...—Ela parecía tener un nudo en la garganta.

–él se aferró a un final feliz para ambos...—terminé su frase.

Ellos asintieron. Trollino se veía totalmente destrozado...
Ela estaba demasiado incomoda.

Pero en mi mente solo estaba Mike.

–vamos a buscarlo, gracias Javi—les dije a los castaños y agradecí al azabache.

Rápido nos dividimos y comenzamos a buscar por el lugar a Mike.

Los chicos estaban buscando en los salones y talleres, yo revise en los baños, pasillos, al final salimos al patio. Me quedaba ver la jardinera.

Al entrar ví la fuente, me sentí mal por Mike. Estaba por adentrarme más hasta que escuche los leves sollozos.

Me di vuelta y justo entre los arbustos estaba Mike.

Puse mi mano en su hombro y dió un saltito del susto.

Al verme parecía inseguro. Sus ojos aún lagrimeaban.

–¿Raptor?...

Me agache hasta su altura. Puse mi mano en su hombro y luego en su mejilla.

Estaba sonrojado, probablemente del llanto. Él me miró por unos segundos para volver a romperse en llanto.

Me abrazó lo más fuerte que pudo y yo le correspondí inmediatamente. Su cuerpo temblaba y estaba ahogando sus hipidos.

Sparta y Muzi no tardaron en llegar. Ambos se unieron al abrazo.

Todo estaba mal, incluso me equivoqué con Trolli. Con Pinky, ellos tomaron desiciones, fueron malas pero lo que hicieron mis amigos no fue su culpa.
Yo no hice nada para evitarlo, en cambio los apoyé.

Esto había sido culpa mía.

...

—Gonzalo Arí C.V.