capitulo 13

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Hoy desperté más ansiosa de lo normal y me pregunté ¿Porque?.
Recordé que la noche anterior el chico de mis sueños me había invitado a una cita a un restaurante, pero yo no lo podía creer, pensé que pudo haber sido un sueño, hasta que sentí que mi celular vibro avisando que tenía un mensaje nuevo

Mensaje:

Villa: buen día linda,  te quiero lista a las 7 ¿okey?

Meli: hola Villa, si, a las 7 me tienes lista

Villa: okey nos vemos entonces

Meli: si, nos vemos, bye

Villa: te quiero

Fin de el mensaje

Con ese mensaje pude corroborar de que no había sido un sueño, en efecto todo estaba pasando de verdad.
Salí de un salto de mi cama y baje a desayunar con mamá y papá.
Entre a la cocina y ellos estaban hablando de cosas del trabajo, al percatarse de que yo había entrado a la cocina me saludaron

Mamá m: Buen día hija

Papá m: buen día mi princesa

Meli: buenos días mamá y papá

Yo, después de saludarlos, camine en dirección a buscar una taza en el estante para tomar café

Mamá m: ¿a que se debe tu alegre sonrisa de hoy hija?

Voltee a ver a mi madre sobresaltada por su pregunta y no me quedo más remedio que responder

Meli: no es nada, solo que hoy Villa me invitó a cenar a un restaurante

Mi padre abrió los ojos con gran asombro, en cambio mi madre solo sonrió con gran emoción

Papá m: ¿irán todos los chicos o solo ustedes dos?

Mamá m: hay por dios no seas tonto, no ves que la invitó a una cita

Yo solo pude sonreír nerviosamente, y papá solo me estaba observando como con un poco de nostalgia

Mamá m: tienes que aceptar que tú hija ya está en la universidad y está creciendo

Papá solo mantuvo el silencio, luego se levantó de su asiento y dijo

Papá m: es verdad, estás creciendo, pero Meli solo prométeme una cosa

Meli: ¿si papá?

Papá m: cuídate porfavor, no dejes que ningún chico te lastime ni te pase por encima, Aste respetar ¿si hija?

Meli: si papá, lo prometo

Luego de eso se sentó nuevamente y comenzamos a reír y hablar sobre cualquier cosa que se nos llegaba a la mente, hasta que cada uno volvió a lo que tenía que hacer

[...]

Lucía: ¿y... Que tal este?

Meli: no, está muy escotado, no quiero parecer ofrecida

Valentina: ¿y.... Este?

Meli: pero tampoco quiero parecer monja

Lucía: ¡entonces que es lo que quieres Meli, decídete ya!

Meli: no lo sé, que alguien me mate porfavor

Valentina: yo te voy a matar si no elijes un vertido ahora

Meli: yo solo quiero un vestido que no sea tan revelador pero que tampoco cubra todo, quiero dar una muy buena impresión

Lucía: está bien, veremos qué podemos hacer

Luego de un rato de revolver el clóset de Lucía, yo ya me estaba dando por vencida, hasta que....

Lucía: o por dios... ¡Perfecto!

En ese momento, Valentina y yo volteamos a ver a Lucía

Lucía: encontré un vestido perfecto

No lo podía creer, ese vestido era perfecto, era de color dorado con lentejuelas, no era tan escotado pero tampoco cubría demasiado

Meli: ese es...

[...]

Ya casi es hora, le estaba dando unos toques finales a mi maquillaje cuando.....

Tocan la puerta

Meli: pasé

Mamá m: hija, solo quería dejarte esto , solo por si lo necesitas

Entró en mí habitación, dejo algo en la cama y antes de cerrar la puerta dijo....

Mamá m: estás hermosa

Meli: gracias mamá

Salió de la habitación y cerró la puerta, en ese momento me levanté de mi asiento y me dirigí a la cama, para ver qué es lo que mamá había dejado en la cama.
Abrí los ojos con sorpresa y una risa se escapó de mi boca, mamá había dejado un preservativo para mí

Sonreí y luego seguí arreglandome el cabello.

Mi vestido era de un color dorado precioso y tenía lentejuelas plateadas, el vestido era corto, y los tacones eran del mismo color de el vestido, decidí usar un collar de perlas y anillos que combinaban perfecto con todo.

Una vez había terminado me senté delante el espejo y me mire fijamente, sin mover un músculo, pensado en todos esos momentos con Villa, como cuando Simon no podía llevarme a el  bar y Villa pasó por mi, todas las conversaciones sobre nuestros gustos, vidas, etc, nuestro primer beso, la noche que durmió a mi lado, la vez en que los chicos nos dejaron solos en el sofá de mi casa, incluso cuando lo vi por primera vez en aquel salón de clases, cuando me ayudó a entender los temas de matemáticas.....

En ese momento tocaron la puerta nuevamente

Meli: ¿quién es?

Mamá m: hija soy yo, solo quiero decirte que Villa ya está aquí

Mi corazón latía a mil por hora, no reaccioné rápidamente, me levanté de golpe y dije.....

Meli: ham, bueno gracias ma, hay bajo

Mamá m: okey hija

Me mire al espejo nuevamente para controlar que todo estuviera en orden, tome mi celular y por si las dudas el preservativo y lo escondí en mi cartera, apagué la luz de mi habitación y abrí la puerta.
Bajé lentamente las escaleras, estaba temblando de la emoción, creo que nunca en mi vida me había sentido así

Me estaba acercando a la sala y mi corazón latía cada vez más rápido, hasta que lo vi...

Villa estaba mirándome desde la sala, los ojos se le llenaron de asombro y una pequeña sonrisa salió de su rostro

Villa: hola Meli

Dijo Villa acercándose a mi

Meli: hola Villa

Villa trago saliva y dijo

Villa: te-te ves hermosísima

Meli: gracias Villa, y tú estás muy guapo también

En ese momento mamá entró a la sala y nos miró

Mamá m: ¿a que hora van a volver?

Meli: no lo sé mamá

Mamá m: solo pregunto, porque tu padre y yo también saldremos a cenar y no volveremos hasta mañana

Ahora entiendo porque me dejó un preservativo

Villa: yo la traeré lo más temprano que pueda

Mamá m: está bien, igual pásenla bien

Villa y yo: está bien, adiós

Salimos de mi casa y al cerrar la puerta, villamil me miro a los ojos y dijo

Villa: ¿lista para la mejor noche de ti vida?

Meli: si....








Para Toda La Vida. (Juan Pablo Villamil, Morat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora