🌼 Zombie 🌼 Showho [Monsta X]

One Shot

Extraño. Todo era extraño; su cuerpo extremadamente pesado, su mente confusa y adormilada, sus extremidades no respondían a sus intentos por moverlas, sus párpados se negaban a subir y sentía una sed desmedida. No estaba muy seguro pero había estado escuchando voces a su alrededor ¿Quienes eran? ¿Dónde estaba? ¿Quién era él? No recordaba nada, aún más extraño.

—La reanimación está completa, el proyecto Wonho esta listo para activación...

¿Proyecto "Wonho"? ¿Reanimación? ¿Activación? ¿Qué estaba pasando? Era una voz femenina pero se oía extraña, fría, mecanizada, como si se tratará de un robot. El aire entró de golpe expandiendo su tórax, sus ojos se abrieron pero no era capaz de ver, algo entró en su cuerpo, un líquido a través de una intravenosa en su brazo derecho. Se removió sintiendo que su cuerpo empezaba a responder.

—Es hora de levantarse y cumplir con su misión...

La misma voz ordenó mientras él parpadeaba, su visión había vuelto, era borrosa pero era capaz de reconocer los objetos más cercanos; una mesa con jeringas llenas de líquidos coloridos, una silla vacía y una máquina que parecía estar conectada a su cabeza. Parpadeo varias veces hasta que fue capaz de ver con claridad, levantó su brazo izquierdo con dificultad, su mano temblaba mientras arrancaba la intravenosa de su brazo derecho.

—¡Ah!

La primera sensación que tenía y podía reconocer era esa... El dolor. Le había dolido, mucho, demasiado. Intentó levantarse pero un jalón en su cabeza lo detuvo, había olvidado que su cabeza también estaba conectada a algo, su mano derecha se encargó de sacar las agujas que estaban hundidas profundamente. Otro grito abandonó sus labios, se apoyó en la incómoda camilla para poder levantarse, su cuerpo no respondió por completo causando que cayera al suelo.

—Arg...

Se quejó intentado nuevamente levantarse, después de caer varias veces más, logró colocarse de pie y caminar a tropezones hasta el vidrio que tenía enfrente. Golpeó con suavidad tratando de llamar la atención de alguien pero nadie contestó, no parecía haber alguien, ni siquiera escuchó otra vez la voz mecanizada. Tomó la silla que había visto al despertar y la lanzó con una fuerza que no sabía que poseía.

El vidrio se rompió, aún con movimientos torpes y lentos se apoyó en el marco para saltar, salió del pequeño cuarto y miró confundido alrededor. No reconocía nada, parecía un hospital pero las paredes y suelos blancos estaban manchados de rojo carmesí, casi cafe... Sangre. Tomó una bata blanca que estaba en uno de los percheros y se la colocó, había estaba desnudo todo el tiempo, salió del hospital para terminar en una calle también desconocida para él.

—¿Misión? ¿Tengo una misión?

Susurró con el ceño fruncido, no entendía, ni siquiera recordaba su propio nombre o identidad pero la palabra "misión" estaba tatuada en su mente. El sol estaba en su punto más alto, dándole una visibilidad perfecta de su alrededor, habían varios carros estrellados y destrozados pero ningún cuerpo. Inclinó la cabeza a un lado y miró con curiosidad una patrulla que estaba contra un poste de luz.

—¿Policía? Es tan familiar...

Murmuró para sí mismo mientras tocaba el frío metal con aquella palabra escrita, una imagen viajo a su mente, se veía sonriendo mientras portaba un impecable uniforme policial. Movió la cabeza para no pensar en eso, usando su codo rompió una de las ventanas para sacar la escopeta que estaba en el asiento del copiloto, comprobó que estuviera cargada y comenzó a caminar sin dirección aparente. Al parecer tenía una misión que cumplir.

—¿A dónde vamos? No hay un lugar que sea seguro, Jooheon...

El mencionado rodó los ojos e ignoró los comentarios pesimistas de su copiloto, Hyunwoo suspiró mirando por la ventana que tenía una malla de metal, una de las tantas protecciones que tenía aquella camioneta contra los zombis. En la parte trasera dormían Hyungwon y Changhyun, se veían bastante tiernos, aunque no lo fueran. Se dirigían a una cuidad para re-abastecerse, necesitaban alimento, gasolina y municiones.

—¿Sabes? Lo de HoSeok pasó hace mucho tiempo, podrías intentar...

—No quiero hablar de eso...

Lo interrumpió con dureza y una mala mirada, Jooheon asintió en silencio y volvió a fijar toda su atención en la carretera, la cuidad se veía más cerca. Hyunwoo sonrió con ironía, después de ver el cadáver de HoSeok en el suelo y ser sacado de ese lugar por esos tres chicos, entendió esa frase que siempre decían sus viejos compañeros del ejército: "Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde".

Habían pasado tres meses y aún sentía ganas de llorar por sólo recordar su nombre, se había enamorado de ese policía testarudo y sentimental pero eso dejó de importar cuando murió, cuando murió tomando su mano y no hizo nada por impedirlo. Volvió sus manos puños y los apretó con fuerza, había visto morir a miles y luego ser atacado por ellos mismos pero ninguna muerte le dolió tanto como la de...

—¿HoSeok?

—¡Hyunwoo, ¿Qué haces?!

Jooheon detuvo la camioneta cuando notó que el moreno abría la puerta dispuesto a saltar aún estando en movimiento, Hyunwoo bajó de la camioneta y corrió hacia la figura blanca y masculina que caminaba desorientada por la carretera, no era posible, ¿o si? Tal vez estaba alucinando debido al horrible calor pero podía disfrutar de su ilusión por al menos unos momentos, ver a HoSeok por algunos segundos era un regalo.

—¡HoSeok!

Gritó lleno de emociones indescriptibles, estaba tan cerca de tocarlo pero el más pálido se giró hacia él apuntándole con una escopeta, tenía el ceño fruncido y lucia tan confundido ¿No lo recordaba? ¿No era su HoSeok? Se detuvo a dos metros y lo miró con extrañeza, HoSeok había muerto, él lo había visto, él había estado ahí pero... Tal vez también había muerto y no lo recordaba, realmente era una situación que no comprendía.

—¿HoSeok? Soy yo, Hyunwoo...

—¿Hyunwoo?

Ese nombre era familiar, lo reconocía, en algún lugar de su interior ese nombre lograba estremecerlo. Hyunwoo aprovechó su estado desorientado para acercarse y abrazarlo, la escopeta cayó al suelo y todas sus defensas también, todo en ese chico que creía era un desconocido, le resultaba irónicamente conocido. Qué raro, sintió un dejà vú, ese momento brilló en su mente como un recuerdo lejano.

—¿Te conozco? ¿Me conoces? ¿Sabes quién soy?

Su voz se volvió cada vez más desesperada y urgente, Hyunwoo se separó un poco, lo suficiente para ver su rostro, frunció el ceño sin saber que responder y acarició una de sus mejillas. Cerró los ojos disfrutando de ese cariñoso tacto, se sentía extrañamente bien estar envuelto en esos brazos que aún creía desconocidos, si ese chico decía conocerlo ¿Debería simplemente ir con él y olvidar su misión?