Incendio

IV

Cuarta Etapa: Humo
La cuarta etapa se caracteriza por la emisión de una gran cantidad de calor, llamas, humo y sobre todo gases tóxicos. Muchas personas al estar dentro de un incendio pierden el sentido debido a la gran concentración de gases tóxicos, lo cual eventualmente podría conducirles a la muerte.
Era el día de su aniversario y Juan Pablo estaba en una joyería, le iba a proponer matrimonio a Simón. El joven no tan joven de ojos verdes pasó el día con Simón, tenía todo planeado para dar el gran paso. Al primer lugar que fueron, fue al parque, la noche anterior había llovido así que Villa puso su chamarra en el pasto para que él y Simón se sentarán encima para no mojarse, comieron hamburguesas de Mcdonalds, disfrutaron de la vista que tenían de la ciudad ya que estaban sentados en una colina alta que estaba ahí, el segundo lugar que visitaron fue una librería antigua, Villa sabía del amor de Simón por la lectura así que lo llevó a ese lugar para que comprara algún libro que no tenía, Juan Pablo nunca se sintió tan feliz por escuchar a alguien diciendo palabras que él desconocía, lo último que ellos hicieron no fue planeado por Villa sino por Simón, era una cena en su casa, (suena bastante loco que Simón cocine porque el quema hasta el agua)
Villa se alistó con su mejor ropa, en el bolsillo de su pantalón guardaba aquel anillo que marcaría una nueva etapa en su relación, salió de su casa, el camino hasta la casa de Simón lo sabía de memoria, después de que Juan saliera de su casa comenzó a llover, cada vez aumentaba el agua que le dificultaba la visión del camino. Villa vió unas luces y de ahí en más no supo lo que pasó después, antes de perder el conocimiento escucho la voz de Simon llamándolo.
Simón estaba impaciente, miraba la hora con frecuencia, se sentía un poco triste porque Villamil aún no llegaba. El teléfono de Simón sonó y lo agarró rápido pensando que era Juan, se sorprendió al ver el número de la mamá de Villa y se preocupo. -Bueno. La voz de Simón salió rasposa, un nudo se había formado en su garganta. -Villa está en el hospital. Eso fue lo único que bastó para que Simón saliera corriendo de su casa, Simón iba a más de 80 kilómetros, al diablo las reglas él tenía que estar ya con su Villa, al llegar al hospital le preguntó a una enfermera por el cuarto de Villa, cuando ella le respondió él corrió hasta el elevador para llegar rápido, al llegar se encontró con la familia de Villa, su suegra lo abrazó fuertemente, entró a la habitación y ver a Villa ahí tan frágil le partió el corazón. -Hola Villa. Simón acarició la mejilla del ojiverde y le dió un beso corto en los labios, con mucho cuidado. -Hola cariño. Villa intentó sonreírle pero no pudo. Simón estaba llorando, realmente le dolía la situación, Juan trataba de tranquilizarlo diciéndole que iba a estar bien pero los dos sabían que no. Hubo un rato en el que Villa empeoró, las enfermeras conectaron más aparatos a su cuerpo, Simón lloró más, los dos sabían que la hora final de Juan estaba cerca, él lo aceptaba pero Simón no. -Villa no te quiero perder nunca. Simón no podía controlar las lágrimas en ese punto de la noche. -Tengo miedo Villa. Juan Pablo lo volteó a ver sacando fuerzas de quien sabe donde le entregó el anillo a Simón, él lo tomó y se lo puso, lloró un poco más. -Voy a estar bien Monchi, vamos a estar bien, te prometo que nos vamos a encontrar en todas las vidas que nos quedan por delante, quiero que seas feliz, que vivas tu vida como si yo todavía estuviera ahí, sí, te va a costar pero cariño eres Simón Vargas tu puedes hacerlo, siempre te voy a acompañar. Simón volteo a ver a Villa. -Juan no te vayas, no me dejes solo. Le mostró el anillo en su dedo. -Acabas de proponerme matrimonio, no es la mejor situación pero lo hiciste. Villa habló. -Simón tienes que ser feliz. Simón pensaba que no podía llorar más pero lo hizo. -Villa, yo soy feliz contigo aquí. El sonido de la máquina que cuenta el pulso empezó a bajar, Simón le dió un beso a Villa como despedida. -Nunca te olvidaré. Se escuchó un pitido en la habitación, Villa se había ido.
Ellos de alguna u otra forma terminaban encontrándose siempre, ellos son almas gemelas.
Fin