Abrazos dolorosos

Cap 2: Choque de nubes, primer relampago

Tomoe.

Apenas llego al colegio ya tengo alrededos dos compañeras pidiéndome la tarea. Por eso odio mi clase.

Lo que más detesto es que todas las chicas dotadas se me acerquen sabiendo que yo soy considerada la más plana de la clase por no decir de la institución.

Creo que es algo como envidia pero no debo de preocuparme por eso. De todas formas la inteligencia es lo que cuenta.

De la nada todas las chicas se desbanecieron para al darme cuenta que estaban arriba de Noah, es un idiota, tiene el récord de tirarse a más chicas en un año. Y por eso las chicas se acercan, no entiendo la lógica de eras muchachas, son más fáciles que la tabla del 1.

Es seguro que ya debe de tener 4 hijos mínimo en toda la ciudad es decir, por lo que escuché lo expulsaron de su antiguo instituto por revolcarse con la hija del director que es 2 años menor que nosotros.

Seguí mi camino al aula de todas formas debo de agradecerle, me quitó de enzima a esas dos pensadas.

Noah.

Como es de costumbre una multitud de perras me reciben en la puerta esperando que las invite a mi casa a complacerlas, son muy fáciles.

A lo lejos veo a una chica caminar entre la multitud, es muy plana para mi gusto pero de alguna forma me intriga el porque no se unió al circo de perras andantes. Como sea es enana plana y va encorbada como si fuera un bicho raro, obviamente no es mi tipo.

Sonó la campana de clase, así que me despedí de las chicas y me fui a mi clase maldiciendo porque llegaría tarde.

Al llegar a la clase me di cuenta de que nadie estaba en la clase. Hoy... no tenia clases... soy un idiota. Y no quiero ir a casa asi que simplemente daré vueltas por el instituto aver si me encuetro con alguien.

Tomoe.

Hoy no tenia clases, lo sabía pero simplemente odio estar en casa, me senté en el árbol de Cerezo que esta en el patio del fondo del instituto.

Me senté a leer un libro, el que me viera pensaría que estoy estudiando, pero sinceramente estoy leyendo un manga shojo, pruebo cosas nuevas y este me parece algo convincente.

Pocas personas pasan por ese patio, así que es tranquilizante, menos estrés para mi... hasta que lo vi... lo vi a él.

Noah.

Estaba caminando por el instituto hasta que noté que alguien me quedo mirando así que le devolví la mirada. Era esa chica, no creí que la vería hoy que no hay nadie. Me gustaría hablarle.

Me acerqué a ella y se volteó a su libro... ese es... es... es... ¡Es shojo mahou girls! Es el manga shojo de chicas magicas.

-Parece q te gusta el manga, me impresiona viniendo de ti.

-Si.- Respondió ella sin interés en la charla, pero odio que me ignoren.

-Me gustas.

Me miró tan sorprendida como asustada. A tal nivel que no pude contener la risa y explote.

-Era broma, era broma.

-Ya entiendo, todas las chicas dicen que eres genial, pero solo te las tiras y te vas. ¿Eres un patan o un cobarde?- Dijo ella mirando su libro.

Me quedé atónito, esta chica es interesante, pero esta charla es como la colisión de dos nubes, como un primer relámpago.