quisiera que fuera fácil

¿yo te gusto?

-Esos ojos negros, su cabello negro teñido, un lindo fleco irregular y de lado cubriendo la parte superior de su ojo izquierdo, usa labial negro y violeta, delineador negro en las ojeras y si le pones atención verás que sus pestañas están ligeramente rizadas.....¡Es perfecto y lindo, ahhh sus gruñidos!

- Dude solo te pregunté la hora, eres un bicho raro.

Ike Broflovski el estudiante modelo, deportista favorita y el chico más guapo de su salón según listas de las chicas se había quedado flechado ante un malhumorado chico no conformista que al parecer lo odiaba o eso pensaría cualquiera al ver los intentos de Ike con aquel chico que por cierto su nombre es Firkle. Efectivamente el gótico no conformista no era para nada una delicada rosa sino un manojo de belladona, era la definición perfecta de su comportamiento agresivo, altanero, desafiante, algo meticuloso y obsesivo pero con cosas pequeñas, quizá su veneno eran las palabras.

- Lo lamento mucho..me emocioné

Al fondo del salón de clases se escucharon varias risas de sus compañeras, lo más probable es que de alguna publicación de sus enemigas pero en cuanto se movieron unas cuantas se vió como tenían aprisionando al gótico, estaba siendo sujetado por tres chicas de cada extremidad mientras era maquillado, y arreglado tan lindo y femenino que ya no parecía ser el mismo chico radical hasta que lo escuchabas maldecir, gruñir e intentar escupir a las chicas.

-¡¡¡¡DEJENME BOLA DE CONFORMISTAS!!!!

Ike bastante exaltado se levantó inmediatamente a ver y salvar a su enamorado de las garras de tan atroces mujeres. Al estar cerca las chicas soltaron al gótico desviándose hacia el lindo judío quien por supuesto siempre iba con una sonrisa para todas ellas y está ocasión no fue la excepción.
Ahí estaba tan alegre como siempre siendo rodeado por una orda de chicas hormonales revoloteando con las obvias intenciones de coquetear o sacarle una cita con desesperación.

- Tranquilas venía por Firkle ¿Podrían dejarlo en paz, chicas?

En coro las chicas asintieron soltando al gótico de mala gana, el gótico "agradeció" con un gruñido acercandose con una obvia desconfianza al judío.

- Vamos Firkle, recuerda que el maestro te pidió ayudarme

El gótico entendió perfectamente que era una excusa para salvarlo así que solo asintió con la cabeza siguiendo los pasos del judío de cerca al fin saliendo de ese infierno de salón.

- ¿Estás bien, Firkle? Lamento no ayudar antes, no me había dado cuenta

- ..... gracias....

Las palabras casi inaudibles del gótico sorprendió y alegró al judío quien sólo pudo suspirar aún más enamorado de lo que ya estaba. El gótico lo sabía y no solo por la sonrisa de idiota que ponía cuando lo veía sino que su "discreción" al hablar sobre el era incómoda, las cartas con impecable ortografía y gramática que llevaban a su casillero no eran una coincidencia. Pensaba que sino se daba cuenta sería un idiota total por todas esas muestras desvergonzadas de amor hacia su persona.

- No-no te preocupes lo hice como lo hubiera hecho con cualquiera...

- Okay...por cierto, Broflovski, hay algo que quisiera saber

- ¿Oh sí?...ehm adelante pregunta lo que quieras

- ¿Te gusto?

- ¡Mira una jirafa voladora!

- No cambies el tema y contesta

El pobre judío estaba entre la espada y la pared, el holocausto ya no parecía tan malo a su punto de vista. Tomó aire llenando sus pulmones para exhalar con temor viendo al gótico pidiendo a su dios y cualquier otro que pudiera escucharle que no fuera rechazado tan despiadadamente.

- Si-si tú me gustas, Firkle

- está bien

-¿Eh?....¿Y el pudrete, tengo pareja, solo amigos....?

- No te aproveches, Broflovski

Sin duda no se lo esperaba, solo tenía una cosa clara en esa cabeza llena de amor y paz como canadiense orgulloso lo que era "¡¡OMG le gusto, también le gusto!!" Después de todo el chico tierno se puede emocionar con toda esa inocente mirada de perrito.

- Entonces ¿También te gusto?

- No

-¿No?...¿No te gusto?

- No, al contrario te detesto eres un imbecil conformista, un religioso más del montón que no sabe qué hacer realmente por su escaso cerebro

Una cubeta de agua fría calló en el subconsciente de aquel judío, definitivamente cupido se la había jugado de la peor manera.
Sus pequeñas y no tan desarrolladas manos comenzaron a temblar desenfrenadas pidiendose casi rogando a sus ojos no llorar, retiró la mirada y con la poca dignidad que le quedaba se retiró lejos de el. El gótico estupefacto por sus propias palabras se tiró al suelo dramáticamente culpando a su gran boca sin vergüenza.
Ike inconsolable llegó a casa siendo recibido por su pelirrojo hermano igualmente judío quien definitivamente al ver a su pobre y delicado hermano lo tomó rápidamente en un abrazo fraternal para intentar consolarlo y después preguntar a quien debería matar.
A cualquier pregunta o cuestionamiento que su hermano pelirrojo le dirigía era esquivada con suspiros largos y asfixiantes, el mal de amores era más que notorio quizá ya era un padecimiento de familia ¿Por qué? Fácil, el pelirrojo siempre tenía decepciones amorosas pero no una cualquiera sino que hasta el gordo de Erick Cartman lo rechazó sabiendo que era el premio de consolación. Bastante curioso ¿No?....