¡Oliver Winchester, te prohíbo hacerlo!

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El impala de sus padres era algo que le llamaba la atención, siempre le han gustado los autos. 

Pero Dean no lo dejaría manejar, el quería probar, oír el motor del auto.

Era de noche sus padres dormidos, Castiel y Jack hablando en una de las habitaciones, sus hermanos profundamente dormido.

Era su momento.

Salió en silencio de la habitación para dirigirse a donde se encontraban los autos.

Cuando entro miro el impala, era realmente una belleza.

Se subió en el asiento del conductor.

Miro todo su alrededor, sabia como prenderlo sin la necesidad de la llave, lo aprendió después de que sus padre murieran, y el quedara solo con su pequeño hermano en las calles.

El busco la manera de hacer que su hermano tuviera lo necesario, pero la sheriff Jody lo agarro con las manos en la masa, lo separaron de su hermano y el quedo dando vueltas de una familia a otra, nunca hablaría de su hermano, quería que donde sea que este, este feliz y bien.

El sonido de un toque en la ventana lo sorprendió dando la vuelta completamente, Dean se encontraba del otro lado mirándolo.

-Yo... Te juro que no le hice nada.- Trato de justificarse, la puerta se abrió.

-Vamos Oliver, muévete.- Dean lo empujo un poco para que se pasara al asiento del copiloto.

-Solo quería verlo.- Susurro bajando la mirada, Dean tal vez no era su padre pero  sentía que era su padre.

-Tranquilo chico, lo entiendo.- Dean se acomodo mirándolo de frente. -¿Quieres decirme porque no me lo preguntaste? Yo estaría encantado en enseñarte todo de Baby.- Dean solo quería que los niños, que ahora eran sus hijos se sintieran a gusto.

-Antes de que papá muriera no me dejaba tocar sus cosas.- El joven chico susurro mirando sus manos nerviosas.

-¿Recuerdas como... ellos?- Dean sabia que no eran bonitos recuerdos ver morir a uno de tus padres.

-¿Murieron?- El contesto dejando su manos quietas, Dean se movió inquietamente. .-Estábamos en casa, mamá grito, yo corrí para saber que pasaba, había como una persona que le había tocado la cabeza haciendo una luz muy grande que me cegó, ella cayo al suelo y el hombre también hizo eso con mi papá, el me dijo que nos volveríamos a ver, no entiendo porque o que es lo que quería de mi.- Y sin darse cuenta el joven chico estaba llorando.

Dean no entendía, Jody había dicho que fue un demonio pero los demonios no hacen eso, solo los ángeles, el descubriría la verdad.

Pero sus pensamientos se detuvieron al ver a Oliver llorar.

Solo es un niño asustado.

Dean hizo algo que  no esperaba, lo abrazo con fuerza.

-Esta bien, chico, Todo estará bien.- Dean susurro hasta que Oliver cayo dormido.

Dean lo cargo y lo dejo en su cama.

Esos niños hicieron cambiar la vida de los cazadores.

Y todavía hay mucho que descubrir.

Pero la verdad sale a la luz.



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