❛Promise❜『Bakushima』

sɪx

Cuidar a un bebé es difícil, mucho más si se trata de un niño humano, mucho más si jamás ha cuidado de nadie pero de alguna forma se las había arreglado para ayudarle a crecer hasta que llegara a los cinco años, un par más de los que había vivido antes.

No sabe si es porque murió muy joven o porque era joven aún pero el niño jamás preguntó por su mamá o por otras personas, simplemente no se despegaba de su lado.

ー¡Eijirō! ー

Y allí venía, con una amplia sonrisa mientras traía a un jabalí detrás de él.

Toda sonrisa en su propio rostro se eliminó para saltar a la defensar quemando al pobre animal con su aliento de fuego.

ー¡Eso es! ¡Tenemos cena! ー

Rodó un poco los ojos antes de golpear ligeramente la cabeza de su tonta pareja.

ー¿¡Qué hubiera pasado si no estuviera cerca o te hubieras caído!? ー

ー¡Pero estabas aquí! ー

Se estaba alterando tanto que su cola se había salido, incluso estaba gruñendo, ese chico iba a matarlo algún día solo de la preocupación.

ーLo vuelves a hacer y te colgaré desnudo de la cascada ー

Amenazó aunque la sacada de lengua mientras iba a la cueva a buscar los utensilios para destripar al animal le dijo que no le habían tomado en serio, ¿Por qué tuvo que tener un jinete con una personalidad tan complicada? De paso, no sabe si es porque ES un jinete pero el niño tiene una habilidad inimaginable con la magia al punto de poner crear explosiones con sus manos y así derrotar a muchos de sus enemigos que consistían casi siempre en lo que se quería cenar ese día.

Sinceramente no podía enojarse con él, era su razón de vivir, lo que le daba fuerza cada día para seguir respirando y no hacerse un ovillo sin despertar de nuevo, amaba su risa, amaba sus berrinches, ama como dormía tan cómodo alrededor de él, amaba como lo buscaba siempre a pesar que decía que era un chico grande.

No quería compartirlo con nadie, quizás por eso se lo había llevado tan arriba en la montaña para tenerlo solo para él.

No iba a compartirlo con los humanos, no después de que se lo habían arrebatado hace veinte años.

Le encantaba esa vida que poseía ahora.