Los Mellizos Jackson

III. Nuestra profesora es un monstruo...literal.

Arianna Jackson
Caminamos por el museo silenciosamente, la manera en la que Mrs.Dodds nos veía me preocupaba cada vez más, era como que si fuéramos el mayor premio que hubiera descubierto sus ojos.

-Percy ¿Crees que nos culpen por lo de Judy?- pregunto yo en voz baja mirando como caminaba Mrs.Dodds hacia un cuarto en construcción.

-Por la emoción en su cara diría que si, cuanto no daría ella por que nos expulsaran- comenta Percy mientras llegábamos a la puerta luego de que Mrs.Dodds ya estuviera adentro.

Una vez adentro miramos alrededor del cuarto que parecía estar solo- ¿Mrs.Dodds? Podemos explicar lo que vio afuera con Judy- comienzo a hablar yo mientras miraba a mi hermano nerviosamente.

-Las tuberías de la fuente deben ser viejas y pues no aguantan la presi- continuaba mi hermano pero es interrumpido por un chillido de una de las estanterías que tenían para pintar el cuarto, ambos giramos encontrándonos con nuestra profesora de inglés parada en lo mas alto mirándonos con ojos de odio.

-Si subió hasta allá tan rápido no creo que tenga la edad que aparenta- comentó en voz baja a Percy manteniendo mis ojo en Mrs.Dodds.

-Y con el odio que nos está mirando no creo que lo de las viejas tuberías la convenza..- me responde también en voz baja sin quitarle la mirada a Mrs.Dodds.

-¡SILENCIO! Estaba segura de que eran especiales y hoy me lo a confirmado- comienza ella con voz áspera -Ahora díganme ¿Donde esta el rayo?- pregunta ella en una posición que mostraba que quería abalanzarse sobre nosotros.

-¿De que habla? ¿Que rayo? ¡¿Percy que hiciste?!- pregunto histérica a mi mellizo nerviosa gracias a las palabras de ella y la manera en la que nos hablaba.

-¡¿Yo?! ¡No e echo nada! ¡No se ni de que habla!- responde Percy histérico moviendo sus manos rápidamente también dando algunos pasos hacia atrás nerviosamente.

-¡Ladrones! ¡Mentirosos!- grita ella antes de soltar un gruñido alarido antes de transformarse en algo que siempre creí que fueran fantasías, la que pensábamos que era Mrs.Dodds se había transformado en un monstruo con cabeza de perro, alas de vampiro y, en vez de cabellos, serpientes. En sus manos cargaba látigos de cuero, los cuales de verdad no quería saber para que los usaba.

Ambos Percy y yo gritamos dando pasos hacia atrás para estar lo más lejos de ella, yo miro de reojo la puerta lista para salir corriendo cuando se me diera la oportunidad. Antes de que pudiera decir correr hacia la puerta ella se lanzó hacia nosotros específicamente a Percy.

-¡Percy!- gritó al mismo tiempo que lo empujó a un lado a lo cual las garras de la anteriormente humana agarran mis hombros y me tira al suelo -¡Suéltame! ¡No eh robado nada!- continúo gritando mientras forcejeó contras las garras de Mrs.Dodds.

-¡Silencio Semidiosa! voy a disfrutar cada momento y cada grito de dolor- contesta cínicamente mostrando sus colmillos lo cual me hace forcejear más.

'Percy?! Sería un buen momento para salvarme!'

-¡Suelta a mi hermana!- escucho como mi hermano exclama antes de que Mrs.Dodds sea empujada hacia un lado dándome espacio para escapar, lo cual hizo rápidamente corriendo hacia el lado de mi hermano.

La puerta del cuarto abriéndose llamó la atención de los tres, Grover y Mr.Brunner se encontraban en la entrada, Mi mejor amigo viendo a Mrs.Dodds completamente asustado mientras Mr.Brunner la miraba retadoramente.

Mrs.Dodds dio una sonrisa hacia los recién llegados -Llegan muy tarde- comenta antes de dirigirse hacia nosotros.

Grover rápidamente saca una pluma de su bolsillo -¡Percy!- gritó llamando la atención de mi hermano, mi mejor amigo lanzó la pluma la cual milagrosamente mi hermano atrapó.

-¡Esto no ayuda mucho!- comenzó a decir mi hermano nerviosamente.

-¡Es una pluma!- gritó yo mientras doy pasos hacia atrás mi mano toco un tubo de hierro suelto que podía usar como arma lo cual me hizo agarrarlo listo para usarlo si mi hermano no usaba la pluma.

-¡Serán mi almuerzo!- gritó Mrs.Dodds pero antes de que se pudiera acercar más yo use el tubo dándole en toda la cara y tirándola a un lado.

Percy uso la pluma que al voltearlo a ver ya no era una pluma, en su mano ahora estaba una espada, cuando Mrs.Dodds se levanta y se acerca, subí mis manos y lance el palo de metal que le dio en el pecho empujándola hacia atrás dándole más oportunidad a mi hermano de usar la espada.

-¡No tengo más nada Percy! ¡Es ahora o nunca!- gritó yo a mi hermano dando unos cuantos pasos hacia atrás.

Percy tomo aire antes de usar la espada contra ella, luego de varios movimientos drásticos, mi hermano logró atravesarla con las espada haciendo que Mrs.Dodds explotara en una nube de polvo dorado.

-Dime que no acabamos de asesinar a Mrs.Dodds- digo nerviosamente viendo a mi hermano al notar el gran lío en el que nos podíamos meter.

-¡Arianna casi morimos! ¿Y te importa que nos expulsen?- contesta mi mellizo sorprendido mientras me miraba como si tuviera tres cabezas.

-¡Deja de juzgarme! ¡Intento procesar lo que acaba de pasar!- le gritó yo a él ya que era la única manera que me entendiera -Será mejor que salgamos de aquí- Comentó a lo que el asiente.

Luego de que consiguiéramos que la espada volviera a ser pluma salimos corriendo de allí como que si nos persiguieran aunque no lo fuera.

¿Que demonios fue eso? ¿No creerá alguien si explicamos lo que paso? Seguro no....¡Grover y Mr.Brunner estaban allí! De seguro ellos saben algo...

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