[ I NEED A GANGSTA ] Dki-Yoonmin/ OneShot

Parte única

Desde que nació, Min Yoongi estuvo rodeado de lujos y privilegios, los primeros años de su vida había crecido como un chico ordinario, iba a la escuela, tenía amigos, asistía a pijamadas, sus padres lo llevaban a parques de diversiones y le organizaban fiestas de cumpleaños.
Su infancia había sido feliz y despreocupada, como la de cualquier otro niño, sin embargo, su corazón era demasiado inocente para darse cuenta del turbio mundo en el que estaba creciendo.

Su padre se dedicaba al tráfico de drogas, distribuía sustancias a cada rincón de Corea del Sur y algunas partes de Japón. Todo lo que tenía.- autos, propiedades, terrenos, joyas, etc.- los había conseguido fácilmente gracias a sus negocios ilegales.

La familia Min había vivido tranquilamente durante muchos años, eran inteligentes y sabían mantener un perfil bajo. Pensaron que esa estabilidad podría durar toda su vida, pero se equivocaron, un sólo error había puesto en juego su libertad. Y como consecuencia, habían tenido que huir de su amado Daegu, siendo Busan su destino principal para ocultarse.

Desde que habían llegado ahí, Yoongi tomaba clases dentro de su propia casa, no conocía a nadie, no salía, no iba a fiestas y mucho menos socializaba, lo cuál provocó que con tan sólo diez años de edad su personalidad se volviera un tanto insensible y cruda.

Su padre no abandonó los negocios, al contrario, conoció a Park Seung, un asesino a sueldo quién le propusó unirse a él para expandir sus negocios a Europa. Seung estaba casado y producto de ese matrimonio habían nacido dos varones. Pronto, ambas familias se volvieron cercanas y fue ahí cuando Min Yoongi conoció a Jimin, el hijo mayor del matrimonio Park.

Desde que se conocieron, un odio mutuo creció entre ellos. Jimin era todo aquello que Yoongi detestaba y Yoongi era todo lo que Jimin no toleraba, simplemente sus personalidades no encajaban, eran polos opuestos que se rechazaban uno al otro.

Frente a sus familias fingían llevarse de maravilla, pero apenas los dejaban a solas no dudaban en ofenderse o herirse físicamente, dejandose múltiples cicatrices y hematomas en sus cuerpos.
Su odio incrementó con los años, a tal punto que sus familias comenzaron a darse cuenta de que algo muy turbio pasaba entre ellos, lamentablemente no tuvieron tiempo de concentrarse en el tema, pues en una noche fría de invierno los padres de ambos jóvenes fueron asesinados.

Nunca supieron con exactitud quién o quiénes habían sido los responsables de sus muertes, y ni siquiera con ese acontecimiento en común lograron estrechar lazos. Muy por el contrario, juraron frente a las tumbas de sus padres continuar con los negocios familiares, con el fin de encontrar a los responsables y vengarlos.

Cegados por el dolor, la rabia y la ira, comenzaron a prepararse para el mundo del crimen, ambos aprendieron a manejar cualquier tipo de armas, a pasar desapercibidos, a matar a sangre fría, a mentir y a reprimir sus sentimientos más débiles. Sus corazones se oscurecieron, su inocencia desapareció, y su adolescencia se corrompió.

Nunca olvidaron su odio, ni siquiera cuando Jimin decidió irse de Busan, Yoongi no entendía porque esa decisión del menor le había afectado tanto, pero se juró a sí mismo que sí algún día volvía a verlo acabaría con su vida de la peor manera. En cambio, Jimin no supo por qué un sentimiento de decepción se instaló en su corazón cuando el mayor lo dejó ir, y de igual manera, se prometió a sí mismo regresar a su ciudad natal para acabar con la vida de Min Yoongi . Y lo que fue una rivalidad de infantes, pasó a ser una obsesión por asesinarse, cada noche durante nueve años soñaban con el día en que sus manos se llenarán de la sangre del contrario.

Se mantuvieron firmes a sus planes y a sus sentimientos más deshumanos, se convirtieron en los dos asesinos a sueldo más peligrosos de Corea del Sur, se ganaron el respeto de muchos criminales y el odio de toda la ley de Corea. Y sólo esperaron pacientemente el día en que se volvieran a encontrar.