jυngĸooĸ aнora тιene doѕ lιndoѕ geмeloѕ para ѕí ѕolo.
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[EN EDICIÓN, por el momento pueden haber algunas fallas gramaticales no corregidas]
|C O N T E N I D O E X P L Í C I T O|
•NO incesto
°Cambio de edades.
•Relación poliamorosa
°Lenguaje...
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"Ni una sola expresión ni una sola oración puede expresarnos Porque somos perfectos tal como somos Ni siquiera te preocupes, cariño."
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ᴊᴜɴɢᴋᴏᴏᴋ
Definitivamente no es mi día.
Es mi quinto intento de encender el auto y como lo predije, fallé como hace minutos. La ira no pudo evitar explotar de manera casi automática en un golpe seco al volante. Maldición, no otra vez.
-¿Tiene problemas con su auto otra vez señor Jeon?
-Al parecer.- Observo como mi vehículo se encuentra presentando ridículas señales de lo que parece ser una avería interna.
- Han de ser las bujías.
Donghun, el guardia del edificio, revisa meticulosamente mi auto y me tenso al ver la hora. No tengo tiempo para ir al mecánico y mis herramientas se encuentran en el séptimo piso del edificio. No puedo darme el lujo de ir en el lento y aburrido elevador... ¿Correr por las escaleras? Ni de coña. - intente encenderlo esta vez, Señor.
El ruido del motor interrumpe la tranquila mañana y un suspiro de alivio sale de mi. No aburridos elevadores o interminables escaleras por ahora. A veces creo que este señor tiene unas manos mágicas o simplemente mi auto odia mi presencia.
-Gracias, hombre. Me has salvado la vida.
Con un gesto despreocupado, Donghun vuelve a su posición en la caseta para abrirme el portón del condominio. El cielo es mi compañía cuando conduzco por las calle habituales. Al doblar la esquina, distingo el inconfudible olor a pan recién horneado de la repostería de SeokJin, mi vecino.
Mi estómago ruge, aunque el repentino dolor de cabeza me hace masajear mi frente con cuidado. Vaya noche alocada.
La alarma en mi teléfono me da el desalentador aviso de que llevo 27 minutos de retraso.
Maldigo por -casi- milésima vez esta mañana. Ojeo el reloj electrónico a mi derecha y me quejo nuevamente, llego ridículamente tarde al trabajo.
Probablemente no fue la decisión más inteligente no revisar el auto ayer. Pero joder, cuando tienes una compañía caliente y una carpa en tus pantalones lo mínimo que piensas es en tus tareas o en tu pequeño pero aterrador jefe dándote instrucciones de cómo ser una persona escrupulosa y medianamente responsable.
Por más que trato de recordar el rostro de mi acompañante nocturno no recuerdo absolutamente nada. Probablemente era un Beta o un Omega. Pocas veces me he metido con Alfas y la experiencia no ha sido relativamente agradable. No si el amante ocasional solo quería follarme sin cuidado y morder por doquier. Descubrí que no me iba el rollo de ser el de abajo. La experiencia de ser vulnerable a otro no había sido algo gratificante en ninguna ocasión. Por el momento.
