Jimin estaba ansioso y de hecho, un tanto paranoico, había hecho éste tipo de cosas muchas veces, era el mejor periodista de su ciudad, incluso el más renombrado para diferentes tipos de trabajos cuando se trataba de escritura, pero nunca había caído tan bajo, nunca al punto de tener que destruir a alguien.
Suspiró derrotado mientras estacionaba su automóvil fuera del lugar donde sería aquél fanmeeting que tan desesperado lo tenía. Miró su móvil una vez más antes de bajar, la amenaza estaba clara en aquél último mensaje que había recibido: ''hunde a Agust o yo hundo a tu hermano''. Aún no sabía el porqué su cuñado actuaba de esa manera, no tenía idea del porqué odiaba tanto la existencia de ese alfa pelirubio, pero nada podía hacer. Era Seokjin o Agust D, y el castaño no iba a poner en peligro a su hermano.
Entró al lugar con su tan conocida libreta y un lápiz en la mano, buscando con la mirada a su mejor amigo, Taehyung, quien lo iba a acompañar y estaba al tanto de toda la situación, pero no lo encontró. Arrugó su pequeña nariz y agradeció al cielo haber tomado supresores antes de salir, el sitio estaba lleno de alfas y no quería inconvenientes. Envió un mensaje a su compañero, recibiendo respuesta al segundo haciéndolo reír bajo; ''ya estoy fuera, cuida tu bonito trasero de esos alfas''. A veces pensaba que Taehyung simplemente tenía mucha suerte en éste mundo lleno de status. Si bien no era ni un fuerte alfa, tampoco era un débil omega, él simplemente era un beta que podía hacer y deshacer lo que quisiera con su vida. Tenía el poder que tanto deseaba Jimin a veces.
Un peso al lado de su asiento hizo que mirara un tanto asustado, pero se rió al darse cuenta que sólo era su mejor amigo botando un bolso lleno de cosas. Tan exagerado como siempre.
— Si vamos a hacer esto, hay que hacerlo bien.— Dijo por último, Taehyung.
El fanmeeting había comenzado, Jimin miraba curioso al hombre frente a todos, quién se encontraba con una sonrisa en los labios respondiendo cada una de las preguntas que sus fans le hacían, recibiendo regalos y entregando un par de spoilers de sus próximos mixtapes.
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Por otra parte se encontraba Yoongi, un Agust D completamente ansioso, necesitaba que todo saliera bien. Las preguntas hasta en ése momento iban bien, muy bien. Todo estaba saliendo de acuerdo al plan del mánager de Yoongi para así poder subir esa imagen que tanto estaba por el piso. No, no había hecho nada malo, simplemente fue muy ingenuo, estuvo en lugares donde no debía estar y confió en personas que no tenía que confiar. Por la misma razón lo estafaron. Su ex mano derecha, Kim Chul-moo, había mostrado conversaciones sacadas fuera de contexto, había hecho estafas con su nombre a empresas gigantes de música y un par de cosas más que ni el mismo Min Yoongi recordaba. Para él, era muy difícil estar ahí, pero todos le habían dicho que saldría adelante y eso fue lo que tanto se metió en la cabeza. Iba a salir del hoyo en el que lo metió Chul-moo. No iba a permitir que todos los años de trabajo se le fueran por la borda sólo por una persona.
Yoongi a pesar de parecer tranquilo, estaba inquieto, demasiado. Hace mucho rato había llegado un aroma a duraznos con crema a su nariz, haciendo que se removiera en su asiento un par de veces en busca de aquella distracción. No sabía de dónde provenía, pero no era nada bueno. Su lobo estaba desesperándose por encontrar al portador de tan agradable aroma, pero él sólo no podía hacer eso. No podía dejarse llevar en ese momento, haciendo que su lobo prácticamente lo rasguñara para poder salir.
— Agust, ahora vienen las preguntas de los jóvenes Park Jimin y Kim Taehyung, son para una columna de la revista que te hablé.— Mencionó Jungkook, el mejor amigo del rapero.
Yoongi asintió y bajó la mirada para ocultarse un poco ante la incomodidad que se esparcía rápidamente en su cuerpo. No podía ser que su celo le llegara justo en ese momento, ni siquiera estaba predestinado, faltaban por lo mucho, dos semanas para que pasara.
— Señor Min, quién le habla es Park Jimin. La primera pregunta es la siguiente; ¿Es cierto que acosó sexualmente a su ex ayudante?
El chico que hasta ahora estaba incómodo levantó rápidamente la mirada enojado. Eso no lo sabía nadie. No es que haya abusado, pero ese tema lo habían tenido tan guardado que nunca llegó a salir a la luz gracias a ''donarle'' un par de millones a cierto ayudante de mierda. No querían más polémicas, por lo que era la única manera de hacer que Chul-moo se quedara callado. Buscó con la mirada a Jungkook para que le dijera quién había sido el que preguntó semejante tontería, y él, con una mueca, le respondió que era el chico castaño frente a él.
Cuando sus ojos se encontraron, un fuerte aroma a menta y chocolate emanó por todo el lugar, haciendo que afectara a más de un omega que se encontraba ahí, sin embargo, el más perjudicado era Jimin, que con un sólo movimiento demostró sumisión al bajar la cabeza.
Mío. Él es mío.
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