En la primaria todo era igual, el niño se sentaba atrás esperando que sus compañeros no lo noten y pueda estar tranquilo.
El pobre niño no entendía porque sus compañeros se empeñaban en hacerlo sentir mal hasta el punto de hacerlo llorar, o porque sus maestras lo ignoraban cuando quería contestar sus preguntas o no reprendía a sus agresores cuando le tiraban la lonchera o cuando lo empujaban y le pegaban en el rincón del aula.
Él, a sus 10 añitos, creía que todos los niños eran iguales: pegaban, insultaban, agredían tanto verbal y físicamente a alguien que era diferente al resto. A alguien como él. Una víctima fácil que nunca antes tuvo oportunidad de hacer un amigo por lo que no sabía como relacionarse con los demás. A alguien cuyas maestras odian por el simple hecho de tener una vida con todo en "bandeja de oro". Las maestras eran otro problema, tan hipócritas que frente a los padres de los niños sonríen y abrazan a cada uno sin falta ni excepción, pero que apenas los progenitores se dan la vuelta, ellas pueden tirar del niño para que salga del aula sin siquiera hablar del trato que tiene la maestra con él/ella con sus padres.
Dejando de lado el trato de sus maestras/compañeros con el niño, él es, en su clase, el más inteligente y aplicado, ayuda siempre, incluso si lo odian, a todos a ordenar y a resolver las tareas. Tiene un gran corazón, y nunca le negó a alguien su ayuda.
En los recesos, es de los niños más tranquilos, a diferencia de ese grupo de once niños, cuya mitad es muy revoltosa y juguetona, mientras que la otra parte prefiere mirar y reír de sus amigos. Muchas veces quiso ir y hablar con esos niños de grados inferiores o con los dos niños del otro curso. Pero se arrepiente al pensar que lo tratarán de la misma manera que los demás.
Por otro lado, uno de los niños de ese grupo le "hecho ojo" al niño de hermosas y grandes mejillas que se sienta solito a comer. Todavía no habló de él con su grupo, pero lo hará cuando sea el momento indicado. Muchas veces, su amigo le preguntó que miraba, pero sólo lo ignoró, como siempre que preguntaba algo "personal" o "incómodo". Si hubiera sabido que el niño de ojos gatunos necesitaba un amigo, hubiera saltado de felicidad, pero, en sus ojos marrones, solo podía observar aburrimiento y.... ¿Odio? A la comida. No lo entendía, él creía que la comida era lo más, sobre todo las croquetas de pollo con forma de dinosaurio que su mamá con mucho amor le prepara todos los martes y jueves.
-¡Chen! Ya terminó el receso, ¿piensas volver a tu aula o te quedarás ahí mirando a no sé qué?- le dice su amigo mucho más alto que el resto, a decir verdad, su altura, para un niño de su edad, es un poco muy alta, pero así lo quería.
-Sí, ya voy, es que... ¿Chan, as visto al niño de mejillas grandes? Siempre lo veo solo y nunca come... Podríamos integrarlo al grupo, ¿no crees, Yeol?- el otro niño asiente y rápidamente corre a contarles a los demás que harán en el siguiente receso, sí, sin preguntar su opinión, sería más como una orden.
Luego cada uno va a su respectiva aula, algunos acompañados y otros solos, pero todos sonriendo. Menos LuHan, él estaba viendo al chico del que habló su amigo, lo conocía de lejos. Siempre pensó que era alguien lindo y que, si se diera, tendría algo más que una amistad con él, y esa idea sigue en su cabeza. Por eso, no quiere que JongDae se le acerque, siente que si lo hace, perderá toda oportunidad con el niño de ojos lindos. Y esa no es una opción. No señor. Por lo que, si integraban al niño en el grupo, él se volvería su mejor mejor amigo, para luego, intentar, ser algo más íntimo. Sí, ser novios. Y mimar el uno al otro, abrazarse, y compartir comida y ropa, aunque al niño del otro curso le quede grande su ropa, el cree que se verá mucho más tierno.
Y, sobre todo, si eran novios, LuHan lo ayudaría en cada cosa que necesite, porque para él, eso implicaba ser novios. Y nunca antes había pensado en lo enamorado que se encontraba de ese niño, hasta ahora.
Pero son muy chicos todavía para saber que la vida te quita todo lo que amas de la manera más dolorosa y despiadada posible.
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Anorexia
Fanfiction-Xiu, debes comer, por favor... Cariño, eres hermoso, no dejes que te digan lo contrario- ~•~•~•~•~ -¿Ma, estoy muy gordo? Desde que se fue papá tú ya no me dices que soy hermoso... ¿Es porque soy gordo? Eso dicen todos... Incluso tú, madre...- ~•~•...