Hora de aventura: la guerra de las dimensiones.

Capitulo 1: entre portales

Narra: Finn el humano.

Son las 3 de la tarde, y estoy peleando con Jake, estamos probando unas espadas que le pedimos "prestadas" a hunson abadeer anoche, se llama la "espada de los muertos" es de color rojo y es como transparente adentro de ella hay como unas pequeñas almas con caras tristes y desesperadas.

Se estaba haciendo de noche y Jake y yo terminamos de jugar con las espadas, las dejamos en una esquina que tenía ropa sucia y platos de papel usados, Jake y yo estábamos sentados en el sofá de la sala, viendo uno de los documentales que hace Bmo de la tierra de OOO, después de ver una escena en específica, Jake me miro y me pregunto:

-eh... ¿Finn? ¿De dónde crees que vengan las palomas? . me pregunto Jake de manera preocupada y algo distante.

-mmmh... No lo se Jake, ¿de los huevos que ponen las mamas palomas? .le respondí a Jake.

-¿por qué preguntas?. Le pregunte.

-es que... Tengo un amigo que tiene unos huevos de Paloma debajo de su armario, y no sabe quien los puso ahí abajo, y tiene que estirar su mágico... Digo... Gran trasero, para poder empollarlos durante toda la noche sin que su compañero de aventuras sé de cuenta, no quiere que sepa que en el fondo quiere volver a sentir lo que es volver a ser padre de pequeñines. Me dijo Jake de forma distante y algo triste.

-mmmh... Bueno tu amigo tiene un problema. Le dije a Jake de manera incómoda y algo distante.

-pero que no se preocupe, si es un verdadero compañero aventurero, entenderá por lo que esta pasando tu amigo, y creo que más bien ayudara a cuidar a esos huevos de Paloma. Le dije de una manera más positiva.

-de verdad crees eso. Pregunto Jake.

Yo dije que si con la cabeza.

-Finn hay algo que debería contar... . De repente un ruido extraño proveniente de la ventana de la derecha interrumpió a Jake, era como unos golpecitos con un dedo, Jake y yo volteamos la cabeza y nos fijamos en la ventana, de repente un apareció un murciélago gigante apareció por la ventana con la boca abierta y de ojos muy rojos.

Mi compañero Jake soltó un grito de miedo, fue tan fuerte el susto que se cayó del sofá, después el murciélago abrió la ventana y entro, y se convirtió en Marceline.

-perdona por asustar a tu perro. Dijo Marceline de forma sarcástica.

-no me asustaste, sólo me tomaste por sorpresa y me dio un espasmo involuntario en el trasero que hizo que rebotara de tal manera que me cayera al piso. Dijo Jake mientras se levantaba del piso.

-ajá. Exclamo Marceline.

-es verdad, más bien mañana voy con la princesa doctora, a que me revise la glándula trans-formati-elástica si eso es la glándula transformatielastica, la poseemos los perros mágicos. Exclamo Jake.

-ya, ya, serenos morenos. Dije yo mientras me ponía en medio de los dos.

-Marceline, que haces aquí. Le pregunte de manera simpática.

-sólo vengó por que mi padre se dio cuenta de que cuando estábamos viendo quien aguantaba más la respiración en el lago de los miserables, encontramos las espadas de "los muertos", y esa espada tiene una maldición o algo así, y que debemos regresarla de inmediato al inframundo, porque sino papi se enojara con nosotros, y regresara para comerse el alma de los inocente o algo así. Nos explico Marceline de esa manera distante como ella explica las cosas.

-de acuerdo, vamos con hunson abadeer. Dije yo.

Cuando dije eso de repente la dulce princesa entro por las escaleras.