Pelea

1.3K 102 22
                                    


Si, era una idiota. Lo sabía muy bien. De hecho, siempre lo tuvo presente en su vida, las cosas nunca salen como uno quiere; pero aprender de ello era lo que valía.
Y no es que Chloe pensara que su vida era una completa mierda, no. Habían cosas muy buenas, pero allí, cuando dijo esas palabras supo que todo se iría por el caño.

El rostro de Lucifer se contorsionó en una mueca, el rostro de un hombre que siempre estaba pacífico, a veces atormentado por la culpa u preocupado en secreto por otros cuando no tenía él porqué de hacerlo. Le mostraba ahora un rostro tan dolorido y triste que casi le hacía querer retroceder en el tiempo y cambiarlo todo; pero su orgullo no la dejaría a ello.

-¿¡Por qué no regresas al infierno de donde saliste?!

«Jodida idiota Decker.» Se maldijo, sabia bien el porqué Lucifer no hablaba mucho sobre el infierno; solo se había atrevido a confesarle una solo vez, ¡Hasta ella lloró esa noche en sus brazos y lo sostuvo, consolándolo! Además propuso de hablar más del tema, pasar pagina y vivir felices en la ignorancia. Era una hipócrita, fue un golpe bajo y lo sabía. Pero no fue ello lo que le hizo sentir que un nudo se formaban en miles de vueltas rápidas, sino lo siguiente en respuesta.

-Si tanto quieres verme allí, al menos cumpliré con uno de tus deseos.

No le había tomado tanta importancia esa noche, el recuerdo de la discusión enfrió su cabeza lo suficiente para comenzar arrepentirse, cuando la cama estaba vacía y las mantas aún más como para calmar esa molestia. Esa misma noche descubrió que Lucifer, la tomaba en brazos cada noche para mantenerla caliente a la mayor temperatura que su cuerpo pudiese alcanzar, su peopia calefacción andante.

«Ahora lo perdiste...» se recordó mientras sonreía; Esa misma sonrisa se borró tan fugaz como apareció. Todo era su culpa, ella y sus malditos celos que la carcomían y le hacían tener ascl de sí misma. «¡Puedes arreglarlo! ¡Debes encontrarlo!»

A la mañana siguiente, descubrió con terror que él ya no estaba.

Y todo era su culpa; Suya, era responsable de que la única persona que le había importado luego de todo ese tiempo que no.tuvo a nadie a su lado se esfumara literalmente, y probablemente nunca lo volviera a ver si así lo quería.

-Así que...Simplemente se marchó-. No era una pregunta-. ¡Puff!

-Totalmente mi culpa-. Chloe confesó avergonzada, jugaba con sus manos sin atreverse a mirarla-. He dicho algo que no debía y...probablemente no me perdone.

Linda la miró en silencio por largos segundos, solo el ruido del ventilador fijo-. Y...¿Podrías contarme exactamente lo que dijiste? Ayudaría mucho saberlo.

-¿Eso importa?-. Preguntó algo esquiva ocultando el hecho de la culpa sobre ella.

Linda tuvo la descendencia de avergonzarse, colocando en su lugar los lentes de pasta negra que caía en su tabique-. Es...más curiosidad que otra cosa.

-Le dije que se fuera literalmente al infierno-. Chloe confesó.

-oh-. Dijo-...oh.

Chloe pasa la mayor parte de el tiempo lamentandose con Linda, quien no mostró ninguna emoción siendo lo más profesional, aunque sabía que muy en el fondo ella querría reñirle. No la culpaba, era lo justo.

El paso de los días solo empeoraba considerable cuando se confirmó así misma que Lucifer no volvería a menos que fuese por cuenta propia, y al no verse obligado, y en la necesidad de hacerlo, probablemente olvidaría el tema.

Oh dios, estaba tan jodida.

Era algo repugnante que sentía que su entrañas, «Es culpa, mucha...» no era exagerada al pensarlo así, era su culpa después de todo y eso era un peso con el que no podía soportar cargar.

Pelea - DeckerstarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora