Exo vs. Block B

507 13 5
                                    

Detrás de ti, bajo la cómoda esa que parece ser de un tiempo pasado, ahí guardas el arma que te obsequió tu padre. No esperabas tener que usarla, sólo estaba allí por si a caso; al menos eso creías.

Exo vs. Block B

Un policía que se ocupa de su familia y trata de proteger a su hija dejándola bajo el cuidado de una automática... descuidado de su parte; pero sé cómo manipularla. Sin que él lo supiera ayudé a esos delincuentes a saquear el mini mercado. ¡Vaya ideas! La usé simplemente para asustar, pero me gustó el reflejo que provoqué al pasar frente a la nevera con puerta de vidrio.

Durante las vacaciones de verano fui al campo de mi abuelo: se le ocurrió llevarme de caza.

─Ahora todo tiene sentido ─pensé en voz alta.

Mi vida, empuñar un rifle, manejar un arma... El problema, ahora, era decidir el camino a seguir. Ya le había dado el bocado a la adrenalina que se siente al cometer un delito. Espera, no fue sólo ese, hubo más. Pero esta fue la primera vez que le disparé a algo y le di en el punto justo que impediría, luego, que la carne supiera mal: el ojo del venado. Maté... acabé con una vida, y me sentí fuerte y codiciosa. Se estaba descifrando el camino...

─Ingresa a las fuerzas especiales ─me aconsejó, sin dudar, mi abuelo.

Y así lo hice. A pesar de que antes hubiera estado en contra del orden social, y hubiese roto las normas y leyes moralistas, me enlisté al finalizar el verano.

El ingreso constaba de una evaluación psicológica y física. Pasé esa última con halagos, mi destreza nunca fue un problema. Sin embargo, siempre me creí una loca por amar la adrenalina y sentir esas ansias desquiciadas por empuñar un arma... parece que de eso se trataba. Entré.

La vida hasta entonces había sido bastante fácil y tranquila, incluso llegué a creer que era demasiado injusta con las mentes inquietas como la mía. Pero entonces, el reporte llegó y las misiones no se hicieron esperar. Juré solemnemente respetar el pacto de silencio. Me pregunté por qué tanto misterio, y, a continuación, mirando la proyección virtual me di cuenta de que todo aquello que viví era una simple fábula; un invernadero de ingenuidad. La verdad estaba plasmada en esas imágenes. La verdadera cara del mundo: la lucha contra los B. Buster del planeta BBC.

A penas conocía ese nombre. La noticia salió una vez en el diario, pero no pasó de eso: una, de entre tantas falsas historias sobre extraterrestres. Sin embargo, era real. Así lo planteaba la alianza: los "Exo", guerreros provenientes de un planeta vecino llamado Exo-L, con quienes hay registros de guerra en un pasado, hecho que fortaleció los lazos de hermandad tras el cambio de reyes; allá por los siglos XV y XVI.

Me esperaba una misión en conjunto con agentes de Exo. El planeta BBC, cuna de los esteparios, sería nuestro punto de encuentro y destino. El terreno enemigo ya había sido investigado por la alianza. Su tecnología de avanzada -superior a la nuestra-, les permitió observar el terreno, hasta entonces desconocido, de los B. Buster. Allí fue cuando descubrieron la gran potencia militar y tecnológica que ostentaban. Se supo de acuerdos entre ellos, pero algo ocurrió con esos asquerosos aliens: rompieron lazos.

Mi tropa y la de la alianza encontraron el área indicada para marcar el aterrizaje. Invadiríamos por el este. Los bosques parecían ser algo común, las aguas tan claras y cristalinas. Muy calmo y bello para ser el contenedor de alienígenas tan macabros como los que definía el informe. Según la cabeza de las investigaciones, mi jefe, el plan era acabar con esos malditos come cerebros que habían roto el tratado de vidas, cruzando a nuestra tierra y secuestrando gente para sus investigaciones.

Aún seguía ansiosa por verle las caras a esos repugnantes extraterrestres mientras acababa audazmente con ellos. El traje que usaba me protegía del frío y del calor, además de servir de armadura y dotarme de una gran fuerza. Negros, como las armas. Ese atuendo sí que iba conmigo.

Con un disparo (Exo-Block B)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora