MI SIRVIENTE, MI ESCLAVO...MI AMADO (NARUSASU)

XI

Luego del espectáculo dado por ese par de diablos todos van a sus casas, Naruto y Sasuke no son la excepción. Ya casi estaban en el portón cuando…

-¡Narutoooooo!!!- Le llama una voz familiar

-¡Sai! ¿Qué sucede?-

-Joven Sasuke…¿Me presta un momento a Naruto? Deseamos darle un obsequio de parte de los mayordomos…-

-Esta bien pero que no tarde-

-Muchas gracias…ven Naruto…-

-Si…no me tardo…- Al decir eso Naruto le guiña un ojo a Sasuke y este se sonroja-

Sasuke salió del instituto y espero a Naruto cuando se percato que alguien se acercaba, levanto la mirada…

-Asi que tu eres Uchiha Sasuke…-

-¿Acaso te conozco?-

-No…esta es la primera vez que te veo…eres tal y como me dijeron…-

-¿Y que puedo hacer por ti?-

-Por ahora nada…solo deseaba verte…pero ya tendremos otra oportunidad de hablar…nos vemos…-

Y se alejo…la persona que le hablo a Sasuke era la chica de cabello largo que observaba de lejos…

Sasuke observo como se alejaba cuando Naruto llego…

-Gracias por esperar…¿Qué sucede Sasuke?-

-Nada…eso creo…bueno, vámonos…-

Y se marcharon…Naruto ve la inquietud de Sasuke y la preocupación que emana.

-Sasuke, creo conocerte y siento que algo pasa…¿Qué te sucede?-

-Naruto, ¿Podrías describirme otra vez a la Srita. Namikaze?-

-Claro…tiene cabello largo y ojos azules…-

-¿Y que color es su cabello?-

-¿Porque me preguntas eso?-

-Solo dímelo, por favor…-

-Es rubio…-

Sasuke hizo una expresión de sorpresa y quedo pensativo

-¿Qué pasa Sasuke?¿Porque querías saber eso?-

-Es que una chica con esas características se acerco a mi cuando te estaba esperando y me dijo “ya tendremos otra oportunidad de hablar”…no se que pensar…-

Naruto callaba y veía a Sasuke con temor…

-Con todo lo de Kabuto había olvidado eso…debo hacer algo…pero no se que…-

-Lo único que te puedo decir es que esperes la fecha en que te veras con ella, luego algo se nos ocurrirá…-

-Tienes razón…es todo lo que puedo hacer…-

Asi pasaron los días…Sasuke los sintió eternos, pero en los brazos de Naruto olvidaba su pena. Al fin llego el lunes, falto a la escuela para preparar la llegada de su invitada, sus padres le exigían mucha formalidad y su hermano le decía que no hiciera nada inapropiado.