Gardenias

2.4K 256 62
                                    

día 1 de la ritmob week!!! prompts en multimedia. dudo escribir los siguientes días pero de verdad quería participar (aunque mi inspiración está en -100). si algún día me animo, los días restantes serán subidos en este mismo libro.




-¿Qué haces?

La rutina es amable con Ritsu. Los lunes se despierta antes que nadie, se viste con el uniforme y tras llevarse el bento que su madre le ha preparado la noche anterior, sale de la casa no sin antes darle los buenos días a Shigeo, que acaba de despertarse. Una reunión del concejo estudiantil lo espera a primera hora del día, así que no se distrae mucho en el camino. Después de la reunión tiene clases: Biología en el primer módulo, Historia en el último. El primer día de la semana tiene que regresar solo (Shigeo tiene deberes con el Club de Fisicoculturismo) y aunque tiene tiempo de sobra, tampoco se detiene por nada.

Al llegar a casa, se lo hace saber a su madre. A veces la ayuda a preparar el almuerzo, otras él lava los platos sucios al final. A veces sale con sus amigos, otras se queda en casa a terminar sus tareas. Cuando Shigeo regresa de sus actividades en el Club siempre le pregunta cómo le ha ido y el otro siempre responde que le ha ido bien y luego va a trabajar en Espíritus y Demás, pero en otras ocasiones se queda en casa si es que Reigen no lo necesita. 

En la noche la familia recibe a su padre con la cena, quien regresa del trabajo. Entonces todos se preparan para ir a dormir, se dan un baño y se cepillan los dientes y solo después de eso cada quien va a su cama. Shigeo prefiere un futón, Ritsu duerme en un colchón con todo y base de madera.

La semana es igual todos los días, apenas se diferencia por pequeños detalles. Mañana tendrá Gimnasia después del descanso, por ejemplo, y Shigeo podrá hacerle compañía durante el camino de regreso. Y está bien, podrá ser monótono, pero Ritsu no lo percibe de esa manera. Es pulcro, es una manera de sobrellevar su día a día de manera casi disciplinaria, en orden, sin ninguna clase problemas. 

Un día, Shigeo rompe la rutina.

-Quiero sembrar una flor.-responde su hermano, con una sonrisa un poco boba en su rostro.

Está vistiendo un delantal y guantes bastante gruesos, debajo viste su uniforme de Gimnasia y ni siquiera se ha quitado los zapatos deportivos (y Ritsu no quiere saber cuál será la reacción de mamá al enterarse que alguien ha entrado a la casa sin quitarse los zapatos, si es que se entera). Con ayuda de una pequeña pala de forma triangular, se encarga de ablandar la tierra de un punto al azar del patio, la cual luego vierte en una maceta de apenas el tamaño de su puño, de color negro.

Ritsu no puede evitar sonreír de regreso. Pocas veces se ve a Shigeo tan emocionado con algo.

-¿Quieres que te ayude?

-No, gracias, Ritsu.

Entonces se resguarda en el arco de la puerta y se dedica a mirar. El sol golpea directo a la nuca de su hermano y éste pronto comienza a sudar y sus mejillas se enrojecen, pero no se detiene hasta que ha terminado. Cuando la maceta se encuentra casi al límite, Shigeo le pone unas semillas y las cubre con más tierra, luego entra a la casa y riega la maceta con agua del grifo, hasta que la tierra adquiere una tonalidad más obscura debido a la humedad.

-¿Qué flores son?-pregunta Ritsu. Lo ha perseguido por toda la casa, observando cada movimiento suyo por detrás de su hombro. Shigeo se ríe.

-Es secreto. Espera a que crezcan.

¿Esperar por qué? Se pregunta Ritsu. Shigeo puede hacer brotar las semillas en cuestión de segundos si así lo quisiera, con tan solo un chasquido de dedos sería suficiente como para que la planta creciera del tamaño de una casa (o de un rascacielos con un poco de ambición). Incluso Ritsu podría, pero no lo hace ni planea hacerlo, por respeto a los deseos de su hermano.

FloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora