|Checkmate| J.H.S

01

-Jung Hoseok, 27 años- exclamo Jimin mientras señalaba con la luz roja a la foto del sujeto- Nació en Gwangju, pero se mudó para iniciar sus estudios en la Universidad de corea, en la cual estudio literatura, es dueño de una librería famosa en Gangnam y es soltero.

-Lo cual es lo más importante de todo esto- recalco Taehyung mientras palmeaba mi espalda-

-No era necesario investigarle la vida al sujeto, solo es una cita a ciegas-suspire- Ni tanto.

-Nara, es necesario – menciono Jungkook mientras entraba a la oficina- Eres detective del departamento de crímenes violentos de Seúl, no puedes relacionarte con cualquiera, además fue el único de la lista que cumplió con nuestros requisitos.

Inmediatamente me cruce de brazos molesta ante aquel comentario.

-Siempre alejan a los chicos de mi – mencione mientras tomaba mi bolso- Yo nunca he alejado a las chicas de ustedes.

-Eres nuestra chica Nara – exclamo orgulloso Jimin- Diviértete en tu cita.

Yo suspire antes de mirarme por última vez en el espejo de mi oficina, mi corto pero alborotado cabello castaño resaltaba junto a aquel dulce vestido carmesí, según los chicos aquella opción era la ideal para una cita en pleno marzo.

Mi nombre es Song Na Ra, tengo 26 años y soy Agente del departamento de crímenes violentos de Seúl, y aunque mi trabajo suene emocionante, de hecho, mi vida es bastante aburrida, vivo en un pequeño apartamento aburrido en un barrio aburrido, incluso sufro de miopía, algo tan común y aburrido.

Al llegar al lugar en el cual tendría mi cita, mis nervios aumentaron así que decidí cerrar los ojos para concentrarme y entrar, cuando lo hice pregunte a los encargados por el nombre de mi cita y estos me señalaron a una de las mesas cerca del gran ventanal, arregle mi vestido y me acerque a esta.

Allí lo vi.

Lucia impecable en aquel traje, su cabello se encontraba perfectamente peinado como si aquella tarea fuera algo estricto para él, su fino, pero al mismo tiempo duro rostro estaba adornado con unos suaves lentes que le daban aires de intelectual, en ese momento supe que lo que se encontraba en su registro era verdad.

-Debes ser Nara- menciono suavemente, su voz era una melodía casi divina-

-Hoseok ¿Verdad? - respondí nerviosa-

Claro que es Hoseok, ya hasta te sabes su vida completa, no seas estúpida Nara.

Rápidamente este se levantó dejando en claro nuestra notable diferencia de altura y se acercó para sacar mi asiento, su sutil roce y el varonil aroma de su perfume provocaron que mis nervios se intensificaran.

-Debo aclarar que no es usual para mi venir a este tipo de eventos, pero mi madre insistió tanto que aquí estoy – menciono sonriente-

-Me sucede lo mismo – respondí por inercia-

- ¿Tu madre te insiste para que vengas? – pregunto frunciendo su ceño ligeramente-

-No, mis amigos, dicen que ya parezco parte de la oficina de tanto estar encerrada y que necesito relacionarme íntimamente con alguien – dije inconsciente de mis últimas palabras-

¡Joder!, lo estas arruinando Nara.

Hoseok levanto una de sus cejas ante mi declaración.

-Íntimamente, interesante – menciono provocando mi sonrojo-

-N-No me refiero a ese aspecto- aclare- Suelo ser algo torpe al hablar, lo siento.

-No debes preocuparte a todos nos sucede – comento tranquilo- Cuéntame, ¿A qué te dedicas que consume tanto tu tiempo?