8 de enero de 2019:
Ojalá la vida fuese tan fácil como parecía.
Han había desaparecido definitivamente del radar, no había ni un solo rastro de su paradero y tampoco existía la manera de comunicarse con él si se dedicó a cerrar cada una de sus redes sociales y a cambiar de número telefónico. Sehun incluso podía suponer que su amado se encontraba en su natal China, disfrutando de los labios exóticos de alguien más.
En esos dos días que habían transcurrido, Sehun no tuvo ni siquiera dos segundos de paz en los que su mente no le atormentara con la dulce voz de Han, por lo que sus lágrimas tampoco habían cesado.
Sólo estaba él con su dolor, nadie lo comprendía. Incluso cuando el coreano sólo necesitaba a alguien que entendiera su situación y no lo criticara ni le diera consejos inútiles, no había nadie a su lado que fuese así.
Cada vez se sentía peor, más solo y más usado, como si Han lo hubiese estado manipulando desde el principio, y ese hecho sólo le partía más y más el corazón.
Al menos una vez cada hora, sus manos desesperadas recorrían la superficie de su cama, en búsqueda del celular que contenía todas las promesas que Han le había hecho. Entonces, así, terminaba por marcar su número telefónico favorito, incluso cuando ya tenía más que claro que ese número no existía más.
— Sehun, ya, olvídate de él— opinó Chanyeol después de ver como su tan depresivo amigo no dejaba de pensar en su ex—. No lo llames mal, mejor vente conmigo, JongIn y yo te vamos a llevar a un bar excelente.
— Yeol tiene razón, bro, ven con nosotros— JongIn era un primo lejano de Chanyeol que, además, había estudiado con Sehun en la secundaria—. No hay nada que una buena botella de alcohol no cure.
— No, no puedo— comentó el menor, retorciéndose en la cama—, ¿cómo creen que podría? Seguro Han está viviendo la vida loca sin mi, pero, ¿cómo quieren que yo haga lo mismo? ¡Le dí todo lo bueno que tenía en mi corazón y ahora me quedé sin nada! Mejor vayan ustedes y diviértanse, no tengo ganas para embriagarme, háganlo ustedes.
— Nunca hay suficiente tristeza para embriagarse, Hun— reprochó Chanyeol.
Sehun dejó escapar un grito de dolor.
Podía parecer una exageración, pero Sehun realmente estaba muy herido, su corazón estaba más que quebrado, no quedaba nada del viejo y amoroso Sehun. Todos los sentimientos positivos que Han había creado se estaban desvaneciendo al pasar los minutos, convirtiéndose en rencor y en odio hacia el amor.
Si siempre había estado para Han, ¿por qué Han no estaba para él cuando más necesitaba de eso? Porque Sehun no necesitaba a su novio Han, al menos no del todo, pero estaba más que seguro que lo único deseable en esos momentos tan deprimentes era la compañía del primer Han que se había cruzado por su vida: su mejor amigo, Lu Han, que más tarde se convertiría en su novio por todas las acciones dulces que hacían el uno por el otro.
— Han~ Han, regresa— suplicó entre llantos desconsolados mientras depositaba sus últimos suspiros de esperanza en otro intento de que Han contestara la llamada.
— Ay Sehun, ya basta, que patético— JongIn le arrebató el celular al menor, que le lanzó una mirada de odio absoluto—. ¿Qué tiene ese Han que otra persona del mundo no puede tener? El muchacho no es nada especial, ¿qué tiene de diferente? ¿Sabes cuántos chinos de su edad, solteros, andan caminando por la calle en la búsqueda de alguien que los enamore en este preciso instante? ¿Qué tiene de especial Han? Dime, ¿es que acaso sabe caminar sobre el mar?
— No— respondió Sehun, harto de tanto reproche.
— ¿Hace oro de cristal?— Chanyeol arqueó una ceja.
— ¿Eso es posible?... O sea, no, creo que no— Sehun se sintió estúpido por un momento.
Quizá era cierto, quizá sus amigos tenían razón.
Quizá Han no era tan especial, porque al final había un millón de personas como él, incluso podía encontrar a alguien más especial que Han.
Quizá iba a ser fácil olvidar a Han.
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Un Millón Como Tú [HunHan] [SongFic]
Fanfiction❝Hay un millón como tú, al final no eres tan especial...❞ Sehun y Han eran la mejor pareja de todas, sin dudas. Se les hacía imposible el no presumirse por cualquier lugar, terminando por estar día y noche juntos, abrazados y revueltos entre los be...