Capítulo 1

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"La mejor manera de liberarse de una tentación, es caer en ella."

-Oscar Wilde

-Andrea-

- ¡Bingo! -celebro al momento de encontrar la vacante en la empresa que tanto esperaba.

Mi llegada a New York no fue tan difícil, pero poco a poco fui comprendiendo que no todo el tiempo dependería de mis padres, y aquí me veo, consiguiendo una entrevista para el puesto de secretaria para el señor Marcus.

Después de llenar toda la solicitud por vía internet, cierro mi Mac y me estiro por todo lo largo de la cama. Un suspiro de satisfacción sale de mi boca por lo que acabo de lograr.

Salir de Italia no fue nada fácil, despedirme de la tierra que me vio nacer y crecer. Pero por algo se comienza.

Olvidando todo lo sucedido en el pasado.

No solo fui yo la que decidió salir de Italia, si no también mis dos hermanos. Thiago y Andrés. Este último es mi mellizo.

Mi residencia por el momento es en New York, en un departamento frente a Central Park.

Todo esto forma parte de mi plan de ser independiente. Logre juntar todos mis ahorros del tiempo que labore con mi padre, y finalmente logre salir de mi querida Italia.

Mis hermanos vivían en el mismo edificio, pero Thiago decidió tener un hogar como siempre lo soñó, y compró una casa para formar la familia que siempre quiso junto a su novia, Clarisa.

Hermanos.

Por ahora me dedico a disfrutar de mi soltería, y así estoy muy bien.

Mi celular suena anunciando un nuevo mensaje.

¿Estas lista? Recuerda que tenemos que ir a solicitar los papeles de nuestra estadía en Estados Unidos. Te espero en 5 minutos en lobby.

Thiago.

Ya estoy lista, enseguida bajo.

Andrea.

Tomo mi bolso y salgo cerrando la puerta de mi departamento. Al presionar el botón del ascensor, otra persona hace lo mismo.

-Disculpa. -giro mi cabeza y veo a una joven rubia que viene agitada.

-No importa -le doy una sonrisa amable, parece una buena persona...

- ¡Ey chica berrinchuda, vuelve aquí! -escucho el grito inconfundible de mi hermano y giro mi vista hacia él.

Andrés viene corriendo envuelto en una toalla amarrada a su cintura.

-Diablos -dice la rubia y nerviosa presiona los botones del ascensor. Cuando finalmente la puerta se abre, ella entra despavorida.

-Mierda -murmura mi hermano al llegar al ascensor.

-Y a ti ¿qué diablos te pasa? -pregunto conteniendo mis ganas de reír mientras espero el siguiente ascensor.

El gira su vista a mi avergonzado.

-Veras... bueno. Esa chica y yo pasamos la noche juntos y pues, me tiene hechizado, una cosa llevo a la otra y tuvimos una noche tan apasio... -lo interrumpo antes de que me dé más información de lo debido.

-Calla tonto, no quiero saber nada de detalles. -rio mientras entro a la cabina de metal -estaré abajo con Thiago esperando.

Dicho esto, las puertas se cierran y me recargo en las paredes.

Miedo al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora