¿Que hacía Axel dentro de mi casa y defendiéndome?
—¿Y tú quien eres?— preguntó mi madre confundida—¿Y que haces dentro de mi casa?—
—Soy Axel pero eso no viene a cuento—Enserio hasta le hablaba con descaro a mi madre—su hija solo le ha pedido un consentimiento para la academia, la cual no le va a influir para nada en el instituto, Abril tiene una voz increíble, es una voz que se que nunca escucharé una igual en toda mi jodida vida. Su hija tiene un talento, déjela que lo saque a La Luz y la gente la conozca esa voz— Dijo fulminandome con la mirada, no me puedo creer que está diciendo esto. Ahora mismo estoy estática en mi lugar igual que mi madre—Así que por favor firme el maldito consentimiento y vayamos a la academia—Continuo ahora mirando a mi madre.
No puedo creer que le esté hablando así a mi madre. Ella se quedó estática en su lugar sin decir nada, hasta que se fue a la cocina. Yo mire fijamente a Axel pensado en cómo podría haber echo algo así, ahora si que era imposible que me firmara el...
—Aquí tienes Abril, el consentimiento— dice entregándome el papel—Ahora si, si bajas aunque sea una décima las notas, te sacaré de ahí, y ahora no hay excusas.
No se como lo había echo, pero Axel a conseguido que mi madre acepte a firmar el consentimiento.
—Pero Abril—prosiguió mi madre—cuando vuelvas quiero hablar contigo, a solas—dijo esto mirando directamente a Axel.
Ella hizo señas para que nos fuéramos de casa, supongo que refiriéndose a entregar el papel a la academia. Cuando salimos no pude evitar echar encima de Axel a abrazarlo. Puse mis piernas alrededor de su cintura y mis manos en su cuello. No me di cuenta de lo que había echo hasta que unos segundos después Axel me agarro la cintura con sus grandes manos. Me aparto el pelo del oido y me susurro.
—Veo que te gusta mucho estar encima mia—
Notando en rubor en mis mejillas me baje lo más rápido que pude, aunque raramente echaba de menos estar al lado suya.
—Lo siento—tartamudee por lo bajo—es que me emocione mucho—
—Ya se ve—dijo con una risilla de por medio, ¿como puede tener esa voz tan hermosa?—Pero es verdad, tienes una voz muy bonita—Dijo mirándome directamente a las ojos
No pude evitar sonrojarme un poco ¿Porque me decía todas estas cosas si luego era un cabron?
—Bueno subes al coche o que, que tenemos que entregar los papeles—dijo señalando los papeles que llevaba en la mano mientras habría la puerta.
—¡Siii lo estoy deseando!—
Subimos al coche y ahora Axel no pone música entonces el viaje es mucho más incómodo que antes. Yo no decido abrir la boca y por lo que veo Axel tampoco tiene pensado decir. Me doy cuenta de que tiene una ligera barba que le sale de la mandíbula y eso lo hace parecer mucho más misteriosos de lo que es. El esta muy atento a la carretera, o eso creo, porque de momento no se dio cuenta de que lo estoy mirando fijamente. Tiene el cabello negro alborotado y un rizo se le cae por la frente, me di cuenta de que siempre se está pasando las manos por el pelo en cualquier momento. Abby siempre me dijo que los tíos que tienen el pelo un poco largo son los mejores. Tenía razón. Podría pasar mis manos por ese pelo durante todo el día.
Vale Abril céntrate
Si vale lo siento pero es que es imposible centrarte con este monumento al lado.
¡ABRIL DEJA DE PENSAR EN ESO!
—¿De pensar en que?— pregunta Axel
O dios no me digas que lo he dicho en alto. Me cagó en todos los dioses griegos.
ESTÁS LEYENDO
A un milímetro de ti
RomanceAbril era un chica a la cual le encantaba cantar. Tenía una vida muy sencilla, simplemente quedaba con sus amigas e iba al instituto, pero su vida empieza a cambiar cuando entra en una academia y conoce al chico el cual pondrá su mundo patas arriba...