stupid kid//(AfterDeath)//

°•4•°

Me puse más nervioso y rojo cuando en mi boca sentí algo mas que sus labios.

Sentia su lengua dentro de mi boca, inútilmente trate de ocultar mi lengua pero, la encontró. Intenté de apartarlo de mi pero no lo lograba cada vez me ponía mas débil dejando hací que el hiciera lo que quisiera, hasta que frotó su lengua junto con la mía.

La saliva empezaba a desbordarse, manchando nuestros labios y mentón de esa sustancia ácida y bastante líquida. Era algo lógico me quedaba sin aire.

—Re... Reaper basta— lo separe de mi fue fácil porque el dejo de besarme.

—Gracias por refrescar me el día—con su manga se limpio la saliva que ambos dejamos derramar—te veré en el salón—se día la media vuelta mientras metía sus manos es sus bolsillos.

Me recargue en la pared resbalando hasta tocar el suelo, mis mejillas seguían rojisas mientras que mi mano tocaba mis labios y la saliva seguía escurrion por mi mentón.

—Joven Geno ¿donde se encontraba?— el profesor preguntaba mientras que yo entraba al salón con la mirada baja—su compañero Reaper no tiene mucho que llego ¿usted porque no vino con el?—

—lo siento fui al baño— al se la mirada pero mis mejillas tenían un color rosado no tan fuerte como anterior mente estaban.

Me dirijia a mi lugar cuando el profesor me inclino la cabeza en forma de que puedo pasar, pase por el lugar de Reaper el estaba hablando con otro compañero así que no me volteo a ver.

Las ultimas dos horas estaba mirando hacia la ventana, sonó la chicharra para irnos a casa normalmente me voy cuando casi todos salieron y hoy no era la excepción.

Planeaba irme lo mas antes posible por Reaper pero vi que se fue con un grupo del salón hací que no tenia de que preocuparme excepto por algo.

La mochila de Berry seguía aqui los demás le metieron las cosas a su mochila pero la dejaron ahí, tenia dos opciones irme y dejarla o llevársela a la enfermería.

Quería escojer la primera, pero mi sentido de curiosidad por saber como estaba era mas fuerte que mi orgullo así que tome su mochila y me dirijia a la enfermería.

—¿pero que estoy haciendo? ¿Porque me tengo que preocupar por el?— solté un suspiro y dirijia la mirada hacia la ventana—es lindo cuando se mete el sol y solo queda ese color rojizo—

En ese momento sentí una tranquilidad. Después de la tormenta. Estaba a punto de jirarme para bajar las escaleras cuando alguien choco conmigo e hizo que callera.

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