1; Rosa

47 3 0
                                    

Me he callado tantas cosas, aunque realmente las he bailado, escrito y cantado.
No me atrevo a decirlo sin metáforas, sin prosas o sin coreografías maestras, porque sería traerlo a este mundo, al mundo de los corazones rotos, de los sismos que rompen, de los volcanes que explotan mariposas atoradas en tu garganta, y a mí me gusta que siga en mí mundo, en el mundo de las aves fénix.
Me he callado todo eso, porque decirlo así como así sería aceptar que es real.
pero ya no puedo callar, no puedo coserme la boca y tratar de adivinar qué es real, no puedo parar de usas metáforas, de pensar versos y de cantar, por más que quiera, callar no se me da.
Sólo quiero gritarle al mundo, que ansío morir, morir antes de los 25, no vivir.
Quiero decirles que pienso día y noche en formas alternas de quitarme la vida, en abrirme las muñecas, en dispararme en la cabeza, en tomar tantas pastillas, en colgarme dentro de mi armario, en aventarme al mar y dejar que el agua salada se atore en mis pulmones, en lanzarme del puente más alto. Pienso en eso siempre, cada hora de cada minuto de cada día. Pienso en que ojalá un carro me atropelle, o que un tipo con un arma me asalte y se lleve mi vida junto con mi celular y mi cartera. Pienso en eso en cada instante.

La niña de las banditas de colores Donde viven las historias. Descúbrelo ahora