~23~ LayHo

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Lay estaba muy imperativo esa mañana. A pesar de no haber dormido mucho y haberle hecho el amor a su novio unas... cuantas veces, parecía como si tuviera tura la energía del mundo.
Como cada mañana, salió a correr, luego volvió, se duchó, siempre ayudaba a Min a limpiar los desastres de la mansión, pero el rubio aún no despertaba, por lo que ordenó solito y sin cansarse ni un poco aún.
Preparó el desayuno para todos pero en una charla puso un par de cosas para su novio. Porque sí, le llevó el desayuno a la cama. Al abrir la puerta, su hombre no estaba en dicha cama. Caminó hasta esta y dejó las cosas a un lado.

-¿Me buscabas? -Lay volteó y allí se encontró a Suho, con su cuerpo y cabellos mojados, y con sólo una toalla enrollada en su cintura.
Lo más hermoso de que estuviera así, para Lay, no era el verlo casi desnudo, sino el poder ver cómo cada cuadrito marcado que el mayor tenía se había esfumado, y ahora había una pequeña curba redondeada que poco a poco iría creciendo.- Xing, sabes que me incomoda que me mires ahí..

-Pero están nuestros bebés ahí. (Saben? Ya ni recuerdo cuántos hijos iban a tener, pero si mal no recuerdo, terminé diciendo que eran dos)

El mayor sólo sonrió y se acercó al chino, besó sus labios.

-Buen día, Ovejita.

-Buen día, Conejito.

Ambos desayunaron juntos, se dieron fruta en la boca y se dieron besos en repetidas ocasiones.
Por alguna razón, ambos estaba muy contentos, estaba siendo un medio día realmente hermoso y debían disfrutarlo.

-¿Quieres que salgamos hoy?

- ¿Es una cita, Wu de Kim? 

-Como tú quieras, Kim de Wu.

-No quiero ser Wu. Tú serás Kim. -Suho se cruzó de brazos.-

-Siempre podemos usar mi apellido real. -Lay se encogió de hombros.-

-Me gusta el apellido de tu abuela... Zhang...

-Entonces, ¿quieres tener una cita conmigo hoy, Kim de Zhang? -Lay parecía querer co.portarse como todo un seductor al decir aquello. Suho volvió a sonrojarse, pero sonrió aún así.-

-Me encantaría...-Murmuró. Comenzó a sentir caricias en su aún plano vientre, y rápidamente se alejó de su novio.- No empieces con tus mimos... de verdad me incomodan aún...

-Debes acostumbrarte, Junnie... llevas a nuestros hijos en ti, y sabes lo que me gusta mimar a los tres.

-Pero... -Al verlo sonreir como un bobo sin remedio, no pudo negarse y sólo se dejó hacer. Lay volvió  a colocar sus manos en Suho y dio suaves caricias, y poco a poco comenzó a cantarle en chino a su pancita.- Sigo pensando que no deberías ser mánager, tú deberías ser uno de los artistas de la empresa de tu abuelo...

-No lo creo, yo sólo debo encargarme de los nuevos talentos, no tengo tiempo de ser uno...-Besó la panza de Suho y se levantó de la cama.- Iré  a prepararte el agua para un baño, así puedes ir más relajado, quiero llevarte a varios sitios hoy

-¿Puedo saber lo que planeas?

-Nop -Negó rápidamente con su cabeza y desapareció por la puerta del baño.-

-Xing~ No quiero darme un baño, tengo flojera~ -Protestó el mayor, quien en realidad parecía más un bebé grande.-

-¡Si vienes, puedo darte el baño yo!

-¿Ya está lista mi agua?-Suho no tardó en aparecer en el baño. Xing rió y comenzó a ayudarle a quitarse el pijama.-
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-Amor, me vas a matar de la intriga... me llevaste a elegir colores de pintura para paredes, colores de alfombras, estilos de sofás, tipos de telas y no entiendo... ¿quieres cambiar las cosas del cuarto otra vez?

-No, no... en la siguiente tienda puede que entiendas más... ven. -Lay tomó la mano de su novio y lo guió por el centro comercial.-

Al principio de su día caminaron un poco, Xing le compró flores a Suho y dulces, ya que había comenzado a tener antojos. Fueron al cine, pero si le preguntan cómo estuvo la película, Kim no dudaría en responder que los labiosde su novio parecían ser cada vez más dulces y deliciosos.
Al salir, Lay llevó a sus tres bebés a comer, fue un almuerzo bastante romántico, entre caricias escondidas y besos robados que Zhang le daba a Kim, quien de vez en cuando soltaba algún chiste tan malo que ambos reían por eso, y segundos después volvían a estar sumergidos en esa burbuja de amor que tan atrapados los tenía.

Pasaron nuevamente por una tienda de dulces, para el postre de los bebés y JunMyeon, y luego Lay propuso dar una vuelta por el centro comercial más cercano que tenían. Al entrar y pasar por distintas tie das de decoración para el hogar, Lay le hizo elegir variascosas a su chico sin que este entendiera muy bien porqué su cita se había desviado del punto principal.
Una salida romántica que terminó en elecciones de cortinas para cuarto.

-Xing...

-Sh~

Entraron a una tienda de muebles y Lay preguntó algo a una empleada, algo que Jun no pudo escuchar porque estaba más concentrado en matar con la mirada a esa rubia tarada que le hacía obvios coqueteos a su hombre. Agradecía que Xing fuera distraído, y que sobre todo, no entendiera de indirectas físicas.

-Gracias, señorita. -Tan educado como siempre, el chino le agradeció a la zorra esa, digo, la amable empleada y fue donde le indicó.-

Al llegar al área que buscaba, Jun pudo observar muchas cosas para bebé. Había cunas, pequeños muebles de colores crema adornados con animales, había mesitas diminutas y sillitas a juego, alfombras de diversos colores en forma de rompecabezas y algunas de pistas de auto.
Estaba tan embobado con todo. Era tan hermoso y tierno.

-¿Qué te gusta de aquí?

-Todo... es tan tierno, todo tan pequeño y ¡Ese armario tiene un conejo morado! Oh~ ¡Quiero todo! -Lay no pudo evitar sonreir de la ternura que le daba su novio.-

-¿Entonces quieres que le lleve todo a los niños?

Suho miró al más alto, confundido, pero la sonrisa de este lo hizo captar la indirecta.

-¿L-Le vas a comprar las cosas para los bebés? -sonrió feliz.-

-Claro que sí, amor... es lo que quisiste desde que supimos la noticia, pero hasta ahora no estabas tan bien de salud, y sé que aunque sea muy pronto, estabas muy ilucionado con darles su lugar a los niños...

A Suho se le llenaron los ojos de lágrimas. La emoción y el amor que sentía por su chico habían chocado de repente, haciéndolo sentir el hombre más afortunado por tenerlo a su lado.
No tardó en abrazarlo y dejar ir pequeños sollozos de felicidad sobre el pecho del más alto.
Wu Yi Xing siempre sería la mejor cura para sus tristezas, era todo lo que necesitaba para su bienestar.
A él y ese amor tan infinito que siempre le demostraba.

-Vamos, bebé, elijamos todo lo que quieras que lleven a casa luego, porque todo será doble -Lay secó su carita com suma delicadeza.-

Suho sólo asintió, regalándole un besito en los labios y una sonrisa más, antes de casi correr a elegir todas las cosas con las que mimarían a sus niños.

Estaba realmente feliz.

Pero Lay, aún tenía una preocupación.. el estarse apresurando  en comprar las cosas, cuando aún Junmyeon y sus bebés no salían de riesgo por completo.
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Hola, volví :))))

¡Los chicos ya le van a comprar las cosas a sus críos!

¿Creen que aún sea apresurado?

¿o todo irá perfectamente y las dudas de Lay están de más?

Todo puede pasar, bbs v.v

Y bueno, más tarde nuevo cap. ;) siempre van en orden, así que ya saben quiénes van~~

Hasta más tarde!!♡

-L-

Cambio de Roles || Projecto EXODonde viven las historias. Descúbrelo ahora