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En la base de la Port Mafia; el jefe Mori Ogai se encontraba entrando en el ascensor saliendo de su oficina con un objeto en sus manos, al estar dentro presionó el botón con el número 9, luego presionó varios botones ingresando un código las cuáles aparecieron en la pantalla; luego de que el sonido de acceso permitido se escuchara en el ascensor, este comenzó a moverse hacia abajo, justo a la mitad de todo el edificio.

La puerta se abrió dejando ver una entrada con dos puertas enormes custodiada por dos guardias, estos al verlo le abrieron al salir del ascensor dejando ver un enorme cuarto, si todo el piso era un solo cuarto, al entrar justo en la pared habían rosales rojas y blancas, una perfecta combinación para el lugar, el suelo alfombrado con una decoración de triángulos con los colores morado y negro, de los lados entraba luz natural, no eran más de la 1 de la tarde.

Al dar unos cuantos pasos se encontraban diversas plantas extravagantes, unas eran flores tanto raras como hermosas, otras sólo eran hojas pero el jefe de la Port Mafia sabía que muchas eran medicinales y otras venenosas, cuando se terminaban los cultivos de plantas se posicionaban cuatro sillones gigantes, dos para al menos 5 personas y dos individuales de un tamaño normal, frente a estos una mesa grande con varios objetos raros y otros aterradores, en un frasco había un corazón, había un colmillo de tiburón, un candelabro con tres velas y en el techo un candelabro enorme decorado con cristales; atrás de la mesa una silla que parecía trono, Mori pasó de largo todo esto y llegó a una cama enorme con dosel con cortinas de seda blancas y negras cayendo de los cuatro lados con dos guardias de frente y uno al lado derecho y otro al izquierdo.

En medio de ese gran aposento se encontraba una chica con cabello azul más profundo que el mar, un ojo color rojo y el otro de un color amarillo intenso unos decían que parecía un ángel, otros que era sirvienta del diablo pero ella se auto llamaba bruja; en sus piernas acariciaba un gato negro de ojos color verde tan brillante que parecían esmeraldas. Su vestimenta consistía en una camiseta de tirantes color lila, pegada a su cuerpo la cual hacía resaltar su figura, un short color vino, una chaqueta con mangas hasta sus antebrazos y no poseía calzado pero si vestía unas medias de red y unos guantes de cuero sin dedos, su cabello recogido en una coleta alta. Levantó su vista del gato y vio a su jefe.

-Jefe, lo estaba esperando – en ningún momento dejó de acariciar al gato en sus piernas, en sus manos tenía varios brazaletes con joyas, uno era muy delicado el cual se enrollaba en su dedo corazón de la mano izquierda y con una cadena delicada continuaba hasta encerrar su muñeca– sabe que a pesar de ser el jefe debe dar algo por el uso de mi poder y servicios -

- Mi querida ______ kun no soy un novato – la chica se levantó de la cama dejando a su gato a un lado dormido mientras se dirigía frente al jefe, el jefe le hizo entrega de una orquídea negra.

- Esta vez se lucio jefe nunca había visto una orquídea negra natural en la zona de Japón – la chica tomó la flor y se la dio a un guardia quien lo coloco en una mesa cerca de las ventanas junto a otras flores. Se dirigió a la mesa y de un movimiento con su mano hizo que la silla se moviera para que ella se sentará y uno de los sillones individuales quedara delante de la mesa donde se sentó Mori – ya se a lo que vino –

- Es imposible ocultarte algo – dijo con una sonrisa mientras cruzaba la pierna y colocaba sus manos encima

- Ha escuchado mis consejos y se que quiere estar con él ahora pero su trabajo se los impide – hizo una pequeña pausa – una vez le dije que debía decidir entre su amada organización o su corazón y logre encontrar donde ambas pudieran estar juntos, luego que hubiera un alto a los ataques contra la agencia todo se ha calmado, lastimosamente la Mafia no hace trabajos legales pero una forma en la que puedan convivir juntos y verse más seguido es siendo aliados, algo más formal como socios –

- _______ kun me matas todas las esperanzas, sabes que no hay forma que la agencia y la mafia sean socios–

- Será difícil y llevará tiempo, la mafia seguirá con sus contrabandos, compra y venta de lo que hace; pero si esto no afecta a los civiles inocentes la agencia no tendrá porque entrometerse en nuestros asuntos –

- Eso es casi imposible, pero estoy dispuesto a arriesgar; mientras la organización no se vea afectada de forma negativa lo haré –

El jefe de la Port Mafia continuó frecuentando a la chica durante los siguientes 5 meses, las cifras aumentaban y la Port Mafia se convirtió en una organización que sólo hacía negocios con organizaciones que no afectarían a los civiles de Yokohama, también cobraban lo que les debían (con sangre).

-Hice lo que me aconsejaste – la chica estaba en su cama leyendo un libro.

- Ahora solo debe esperar 38 horas y las cosas tomarán un mejor rumbo –

Mientras en la Agencia Armada de Detectives.

-Esto es muy raro – mencionó el idealista

- ¿Qué cosa Kunikida San? – preguntó el chico tigre

- No hemos escuchado nada sobre la Port Mafia en estos últimos meses que ha pasado –

- ¿Será que sucedió un conflicto interno? – especuló Atsushi

- Hubiéramos sabido algo hace mucho si hubiera sido eso – aportó Rampo mientras se comía una bolsa de dulces – pero si me resulta un poco extraño, tengo mis sospechas pero aún así no estoy seguro –

- Deberíamos agradecer que no nos están dando más trabajo del necesario – aportó la doctora Yosano

- Estoy de acuerdo estos meses han resultado muy tranquilo sin el desorden de la Port Mafia – dijo alegre el suicida

- ¡TÚ NUNCA HACES NADA DAZAI! – reprochó Kunikida

En ese momento el presidente Fukuzawa salió de su oficina

-Rampo, ven a mi oficina – el mencionado salto de su silla y se dirigió a donde lo habían solicitado.

El tiempo dicho se cumplió y el jefe de la Port Mafia recibió una llamada.

Esa misma tarde ambos jefes de ambas organizaciones hicieron un anuncio a sus subordinados.

-Nos hemos aliado con la Port Mafia/Agencia Armada de Detectives-

-¿¡QUÉ!? – fue lo que todos los subordinados dijeron al respecto (Kunikida se limitó a desmayarse)

- Jefe no creo que sea una buena idea – fue lo que la rubia dijo

- La Port Mafia es más fuerte que nunca Higuchi kun pero la Agencia es astuta no podemos arriesgarnos más a tenerlos como enemigos, no trabajaremos con ellos a no ser en algún caso extremo – fue lo que ambos líderes mencionaron – como el caso de Guild-

- Ellos siguen con sus prácticas ilegales pero en los últimos meses sólo han tratado con los suyos y las muertes que se registran han sido sólo del bajo mundo – concluyó el presidente.

Pará algunos está noticia resultaba gratificante y ventajosa pero para otros era un mal trago que digerir. Lo que no sabían era que las visitas a la bruja serían compartida.

Literalmente este es mi primer fic sobre este anime, la verdad acabo de terminar de ver todos los capítulos y de la nada se me ocurrió, si no te gusta pues no es obligación leer ya que es la primera vez que me encanta tanto una historia mía y si la seguiré, tratare de actualizar cada dos días porque voy haciendo antes de subir ya llevo varios capítulos aunque no creo que sobrepase los 10 y sería espectacular que llegara a eso, dejen sus comentarios me encanta interactuar con los que le gustan mis historias.

BC.

La brujaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora