Vacaciones de la Muerte (SHINKAMI)

Día 4 (por la noche)

Era el último día de las vacaciones para la muerte, Denki Kaminari estaba tranquilo en una mesita haciendo lo único a lo que realmente se había dedicado todos estos días:Arreglos florales.

Shinsou lo veía preocupado, estos últimos días había sido un bólido de energía sin parar:

Gritando, riendo, bailando, ayudando... Ayudándolo a él.

y pensó que como era su último día, estaría vuelto loco haciendo mil cosas, pero no, estaba muy tranquilo cortando ramas, cortando hojas, cortando pétalos, moviendo aquí, moviendo alla.

No se veía triste, pero si tranquilo, y eso lo ponía tenso, por alguna razón no le gustaba verlo así. Se había acostumbrado a tenerlo encima, brincando por todos lados, atendiendo a los clientes, jugando con él.

Limpiaba las mesas mientras lo veía fijamente, Denki se giró rápidamente al sentir lo fijo

-tienes la horrible costumbre de verme así - soltó - lo hacías antes y lo sigues haciendo ahora

El pelimorado sonrió

-Es tu último día de vacaciones...
-lo sé - le contesto el rubio
-¿Piensas quedarte ahí acomodando flores?
-si
-¿Porqué?

El rubio suspiró

-Cuando la gente muere siempre les llevan flores, y siento una gran envidia, a mi nunca nadie me han regalado una

Shinsou se incómodo un poco

-¿Sabes? Eres muy diferente a como te describen
-¿A sí? - dijo volviendo a lo que estaba haciendo
-Sí, antes de que llegarás a mi vida, siempre creí que la muerte era eso, muerte, que eras fría, sin sentimientos y que todo lo que tocabas moría... Y mira esos girasoles son enormes y hermosos

Denki bajo la mirada

-¿De verdad creías que todo lo que tocó muere? ¿Como si fuera una nube de gas tóxico?

Shinsou se revolvió en su asiento incómodo, lo había puesto triste

Se acercó a él, le tomo de las manos y las puso en su propia cara. Denki abrió los ojos con sorpresa

-¿Estoy muerto? - Denki negó con la cabeza - me estás tocando con tus suaves manos y sigo viviendo

Era la última noche que pasarían juntos en ese local, Shinsou no sabía que pensar. Al principio de la semana estaba aterrado con la idea de tener a la muerte, pero estos días lo había conocido a manera muy personal.
Y por más que se negara a aceptarlo, iba a extrañarlo.

-¿Entonces?...¿Está es la despedida? - dijo con la cabeza gacha

-ajam - titubeó Denki

Shinsou era muy alto, Denki le trataba de mirar desde abajo como cuando tenía forma de niña la primera vez que se vieron en la cafetería

Pero Shinsou lo apartaba, tenía miedo...

Denki lo sintió y lo abrazó, lo abrazo tan fuerte que pensó que lo iba a quebrar.

Ninguno de los dos se dió cuenta, pero dentro del pelimorado algo si se rompió.

Su olor era delicioso, sonrió mientras le regresaba el abrazo

Que curioso... La muerte huele a flores y la vida apesta a mierdi.

De repente ya no lo sintió, y se vio abrazándose a sí mismo. 

Se había ido.