Esperándote

T R E S ✔

- ¡Emily!- dijo Thomas entrando a la habitación, se acercó a mí que aún estaba quieta en mi lugar sin moverme desde hace como cinco minutos que Emily me dio la noticia.

Una patadita me sacó de mi trance y miré a Emily y a Thomas y luego a Emily.

- ¿C-Cómo está mi hermano?- pregunté a pesar de temer por la respuesta.

- No lo sé, no me quisieron decir nada por teléfono.- dijo ella.- Pero quieren que nos acerquemos al hospital lo más pronto posible.

- Thomas, debemos ir, por favor.- le dije con los ojos cristalizados.

- Estás embarazada, no creo que sea una muy buena idea, podría afectarte mucho y ya estás en tus últimos meses.- dijo él.

- Thomas, necesito verlo al menos unos minutos y saber que va a estar bien.- rogue. Él hizo una mueca.

- Está bien.- dijo y fui a mi armario a buscar algo rápido para cambiarme, aunque si fuera por mi iría en pijama.

Nos montamos en el auto y nos dirigimos al hospital en dónde estaba Adam, mi corazón parecía querer salir de mi pecho y sudaba la gota gorda, estaba desesperada.

- Doctor, ¿Cómo se encuentra mi hermano?¿Ya se encuentra mejor?- le pregunto al médico que nos recibió hace un momento.- ¿Podemos pasar a verlo?

- Sólo no lo alteren, prefiero evitar lo que sucedió en la noche, cómo ya se los dije.- pidió y asentí. Se fue y yo me acerqué a la puerta a pasos lentos.

No quiero que mi hermano se ponga más mal de lo que seguro ya está. Hoy en la madrugada despertó por fin... y al notar lo que le sucedió se alteró tanto que debieron sedarlo. Por lo que me dijo el doctor está muy afectado con todo esto y será difícil superarlo pero sé que vamos a lograrlo, juntos.

- ¿Quién anda ahí?- preguntó volteando su rostro en varias direcciones. Un sollozo se escapó de mis labios al verlo ahí, caminé hasta él.

- Adam.- logro decir al estar a su lado, extiende su mano tratando de tocarme y la tomo entre las mías.

- Anne, hermanita.- dijo llorando, llevó mis manos a sus labios y besó mis nudillos. Le di un gran abrazo.

- Estaba tan preocupada por ti, tenía mucho miedo de que no regresaras.- dije, llevó como pudo sus manos a mi rostro.

- Nunca te dejaría sola, no podría.- dijo.- ¿Cómo estás?¿Te encuentras bien?

- Adam.- dije y llevé sus manos a mi vientre. Comenzó a tocarlo.

- ¿T-Tú estás...?- dejó la pregunta en el aire.

- Si, serás tío en dos meses.- dije emocionada, me abrazó de nuevo.

- ¿Es de Harold, no?- preguntó con una sonrisa.

- Si, así es.- dije, me senté un poco a su lado para estar más cómoda.- Ya quiero conocerlo y que tú también lo conozcas.

- Pero no voy a poder verlo nunca.- dije y soltó mis manos con algo de brusquedad.

- El doctor dijo que la ceguera podría curarse con tratamientos, y aún así si te quedas así no me importa, voy a apoyarte como tú lo hiciste cuando mamá murió.- le dije.- Estoy segura de que vamos a superarlo juntos, como familia.

- Toc toc, ¿Podemos pasar?- dijo Emily en voz baja entrando con Thomas, me saqué las lágrimas de las mejillas y les sonreí.

- ¿Quién es?- preguntó Adam.

- Son Emily y Thomas, ellos también vinieron a ver como estás.- le dije, Emily se acercó y lo abrazó.

- Cuentas con nuestro apoyo en lo que necesites, Adam.- le dijo ella.

Sé que se está imaginando a su hermano en estas condiciones y se imagina como la estamos pasando nosotros.

- ¿Y Harold?¿Cómo está él?- preguntó Adam. Nadie habló y miré a Emily apretar sus labios.- Hablen, por favor.¿Él se encuentra bien?

- Al igual que tú desapareció en medio de un ataque y casi todos sus compañeros murieron, su cuerpo no estaba ahí por lo que piensan que escapó y busca refugio en alguna parte.- dijo Thomas.- Nos llamaron la semana pasada para decirnoslo.

- ¿Y el bebé?- preguntó Adam.

- Está bien, con la esperanza de que su padre regrese.- respondí.- Pero ahora lo importante eres tú, si mejoras en tres días podrás tener el alta.

- ¿Cómo voy a subir hasta un quinto piso? Ahora soy un inútil.- dijo Adam.

- No eres ningún inútil, y además vas a ir a nuestra casa.- dijo Emily.

- ¿Nos vamos a Atlanta?- preguntó Adam.

- No, Thomas, Emily y yo estamos viviendo en una casa aquí cerca, ellos me ayudan con lo del embarazo hasta que lo tenga y encuentre un trabajo.- le dije.

- Eso último no lo hablamos.- dijo Thomas.

- Me tranquiliza el saber que no has estado sola.- dijo Adam.- Pero no creo poder aceptar estar de mantenido.

- No vas a estar de mantenido, ya verás que pronto vas a estar bien de nuevo.- le dije.- Podrás vivir con esto y saldrás adelante.

- Con el apoyo de todos.- le dijo Emily.