Otro Sendero "Naruto"

Capítulo 2

4 años habían pasado desde que Naruto llegó a la aldea, la verdad es que para el niño albino estos habían sido los mejores 4 años que había vivido, que incluso de forma cómica, se preguntaba, ¿Cómo no se había ido de Konoha antes? Teniendo 9 años su vida había tomado un nuevo rumbo.

Le gustaba bastante entrenar, sobre todo los Jutsus que le había enseñado Keyser y Kotetsu, en los cuales estaban el Kōri Bunshin No Jutsu (o clones de nieve), si se lo preguntan, si, es básicamente el Kage Bunshin no Justu, lo único que implementando el elemento Hyoton, debido a la vejez de Kotetsu, este había conocido tanto al primero, como al segundo Hokage, en su tiempo, de hecho, el viejo consejero ayudó al Nidaime Hokage a crear dicho Justu, lo único que ambos tomaron percepciones distintas en cuanto a la técnica, entre otras técnicas que había aprendido.

Se podía ver a Naruto bastante enojado dentro de su casa, esto se debía a que su hermana Hanako, estaba intentando hacer ramen, Naruto sabía que era muy fácil preparar dicho alimentos, pero la chica era tan mala en la cocina que se le quemaba hasta el agua.

-Hana-Nii, ya es la quinta vez que te sale mal, ¡te digo que me dejes hacerlo a mí!- Dijo el menor bastante molesto.

-Tranquilo Naru-Chan, te digo que se lo que hago, lo otro era solo práctica- Aclaro con una gran sonrisa que denotaba orgullo en sí misma.

-Si, pero no creo que para estar practicando por toda una semana la cocina aún deba terminar en estás condiciones- Hablo con algo de molestia el Peliblanco mirando toda la cocina: huevos por doquier, el piso mojado, fideos que colgaban por todos lados. en resumen, un gran desastre.

-¡Un poco de desorden no va a bajar mi entusiasmo!- Grito Hanako decidida a hacerlo bien.

-¿Un poco?- Dijo con desgana y aburrimiento mientras salía de la cocina en dirección a la sala.

-Hana-Chan, quizá sería mejor que me dejaras a mí hacerlo- Trato de dialogar Honoka con su hija pero le fue inútil.

-No te preocupes Oka-San, lo puedo hacer yo solita- Contesto Sin dejar de mirar el agua del ramen.

Habían pasado unos minutos y Naruto tenía en frente de el un tazón de ramen hecho por su hermana, sinceramente se veía horrible, pero no se lo diría así, aunque sepa horrible, la quería demasiado, y vio todo el esfuerzo que había hecho para prepararlo, así que bebió un poco y probó unos segundos, no sabía mal, de verdad, es decir, si sabía mal, pero a comparación de las otras veces, sabe mucho mejor, de hecho, Naruto se lo termino, sorprendiendo un poquito a Honoka que ni loca se tomaba uno de esos, y haciendo una gran sonrisa en Hanako.

-Sabia que te gustaría Naru-Chan- Dijo Hanako inflando el pecho con orgullo.

-Sigue practicando- Es lo único que dijo el chico Peliblanco.

-Creo que te falta algo más pronto hacer Hana-Chan- Dijo con tranquilidad Honoka.

-¿Si? ¿Y eso que sería Oka-San- preguntó la hija de Honoka con curiosidad.

Honoka apunto a la cocina la cual estaba hecho un desastre completamente, Hanako miró para después asustarse un poco en el proceso, eso era debido a la mirada de su madre, la cual realmente era muy calmada, o al menos por fuera.

-¡Ya voy!- Corrió a la cocina mientras los demás presentes la miraban y reían.

Honoka volteo su mirada hacia Naruto con una pequeña sonrisa -Me gusta mucho que Hanako le ponga ganas a cocinar, después de todo, no se toma casi nada en serio- Expuso Honoka dando un leve suspiro.

-Es cierto, desde que llegué aquí no hay mucho que la motive...- Dijo mirando hacia la puerta -Pero bueno, cómo esta vez no vomité debido a su comida, creo que sería bueno ir a entrenar un rato. ¡Hasta luego Oka-San!- Dijo Saliendo con tranquilidad.