Confíe En Ti (Spideysterio)

Confíe en Ti

Definitivamente podía calificar aquellas vacaciones como "Las Peores de Toda su Vida", o mejor aún"La Peor Experiencia de Toda su Vida" y eso que había sido blipeado por cinco años.

Pero estar encerrado en aquel lugar, en aquella "Pesadilla", superaba a todas sus experiencias pasadas.

No podía creer lo estúpido que había sido, había tenido toda la confianza del Sr. Stark y en un segundo la había tirado a la basura. Había dudado de si mismo, de su capacidad, de sus habilidades. Creyó en cada palabra de aquel tipo que simplemente "apareció" desde otra dimensión, sin pararse a pensar si aquello podía estar bien, si era real.

Solo habían peleado un par de veces, pero sus palabras y sus intenciones parecían tan genuinas. ¿Cómo se suponía que se diera cuenta de la trampa?. Mal interpretó completamente el consejo de su amado mentor, siempre fueron hacia él y no lo pudo creer, no lo podía asumir.

Solo se metía en un problema tras otro. ¿Qué no podía simplemente ser un chico normal por una vez? ¿Por unas vacaciones? Al parecer no. Peter Parker no podía tener un día de tranquilidad.

Se sintió un imbécil en el mismo momento en el que aquella cámara mostró ese holograma. Si no hubiera salido con MJ, si le hubiera dado el maldito collar en su habitación. Si nunca le hubiera regalado aquellas gafas a su "supuesto compañero".

No iba a negar que al darse cuenta del engaño se sintió un iluso, ingenuo, un completo idiota. Lo que menos le importó fue decirle a su amiga que él era Spiderman. ¿Por qué demonios Fury tenía que irse? ¿Por qué todo tenía que ir tan mal? ¿Por qué tenía que sentir aquello?

¿Por qué se tenía que enamorar de él? Eso lo hacía sentir aún peor, porque consideraba que aquel sentimiento lo había segado, al punto de ni su "sentido arácnido" (O "Punzada" como le decía su tía) había notado algo extraño.

Pero ya no había vuelta atrás, él debía ser el héroe. Aunque se comenzaba a cansar.

Su cuerpo dolía, sus respiraciones eran irregulares, su traje estaba dañado, sus fuerzas por el suelo. Pero también estaba lleno de ira y odio por aquel hombre que lo había engañado, por aquel que le estaba siendo todo aquello, esas visiones, sus problemas, todo era culpa de Quentin Beck.

Las personas lo adoraban, lo querían a él, amaban a Mysterio, a ese mentiroso que se hacía llamar superhéroe.

Había caído directo en su trampa, en todas sus ilusiones, y ahora estaba atrapado en la peor de ellas. Ese tipo se estaba divirtiendo mientras él únicamente sufría intentando atraparlo.

Caídas, golpes, reflejos, era todo lo que conseguía. Chocaba contra las paredes, no lograba encontrar cómo salir. Y, cuando pensó que no podía ser peor, todo se derrumbó en su interior.

- Si hubieras sido mejor, quizás Tony seguiría con vida-

Esas palabras fueron un golpe realmente bajo. Tener delante aquella tumba. Sabía muy bien que en la realidad no existía, pero aún así, su nombre escrito en esa piedra. Había quedado tirado en el suelo, mirándola.

Hasta que aquella mano robótica salió de la tierra, dejándolo sin aire. Se puso de pie y retrocedió mientras ese esqueleto en armadura se le acercaba. Hasta que desapareció en la oscuridad.

- ¿Qué ocurre "niño"?- escuchó a sus espaldas, aquella voz que le resultó horriblemente familiar.

- N...no- susurró asustado.

No quería girarse, no quería ver a quien tenía detrás. Los visores de su traje comenzaban a mostrar un panorama borroso debido a las lágrimas de sus ojos.