Inuyasha hablaba con los compañeros de la obra, a excepción de la protagonista, hablar con Kagome para algo más que algo de el guión era inconcebible.
A pesar de que ambos se detestaban y se declaraban la guerra en cada ocasión que podían, eran los mejores en el escenario. Su química en tarima era impecable, la conexión de ambos era magnífica, la mala relación entre ellos no quitaba meritos en su buena actuación.
Kagome se acercó a uno de sus amigos y le abrazó por la espalda, amigo que hablaba con Inuyasha animadamente.
-Eres bueno actuando-dijo el chico a Inuyasha quien ya no reía como antes pues veía a la maliciosa chica sonreír victoriosa.
-Taisho-miró al director de la obra quien lo miraba con reproche-se quedará hasta tarde a limpiar el camerino, no puedo creer el desastre que hay por su culpa, sea más ordenado-y se alejó de ese lugar.
-¿No tienes nada mejor que hacer que joderme la vida?-le preguntó a la azabache quien se encogió de hombros.
-Recuerda que hago una lista de las razones por las cuales te odio, y creo que avanza a pasos gigantes-dicha estas palabras se alejó del grupo contonteando laa caderas.
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365 razones para amarte
FanfictionKagome ha vivido toda su vida bajo el encanto de aquel chico de mirada risueña que le sonría a pesar de ella no ser lo que el buscaba. Un día, cansada ya de todo, sus cartas comienzan a volar.