Angeles de nieve

Capítulo 14: pensé que serías más alto

Unos días después de abandonar Leaf Village, Naruto, junto con Tenten y su equipo, observan el océano en el extremo este de la Tierra de Fuego. Están parados en los muelles esperando que los barcos de la Tierra de los Rayos entren con la marea de la mañana. Su misión es acompañar a algunos dignatarios de la Tierra de los Rayos a la capital de la Tierra de Fuego para una audiencia con el Daimyo de Fuego.

Naruto está apoyado en la barandilla mirando hacia el agua reluciente, perdido en algún lugar profundo en sus propios pensamientos. Tenten, que ha conocido a Naruto la mayor parte de sus vidas, fue la única que realmente entendió lo realmente extraño que se estaba comportando. Había estado callado durante los últimos dos días, ya que tuvieron esa discusión cerca de la primera noche, y en realidad solo había hablado cuando le hicieron una pregunta directamente. Ella había sentido la enorme acumulación de chakra durante esa noche y reconoció que era el rasengan de Naruto y había estado a punto de investigar cuando sintió que de repente se desvanecía en lugar de ser lanzada como un ataque. Luego escuchó el sonido de Naruto y Shimata hablando en voz baja sin ningún indicio de alarma, así que volvió a dormirse, sintiéndose segura de que si había algún problema, la naturaleza ruidosa de Naruto la despertaría instantáneamente.

A la mañana siguiente, todos se habían despertado con el olor de la comida y salieron de su tienda para encontrar a Naruto haciendo el desayuno. Les había dado una sonrisa rápida cuando se acercaron para ver las papillas de arroz que había preparado junto con gruesas rebanadas de tocino en brochetas de bambú que chisporroteaban cerca de las llamas. Justo cuando se sentaron a comer, Hanabi dijo que era su turno de estar en la mañana y preparar el desayuno. Naruto no levantó la vista de su tazón, solo tomó unas cucharadas más de las gachas lentamente en su boca antes de que finalmente respondiera. "Sí, lo siento mucho. Las estrellas fueron muy agradables anoche y el amanecer fue tan increíble que perdí la noción del tiempo. Como iba a tener que estar despierto en un par de horas, de todos modos, simplemente decidí quédate y prepara el desayuno para todos. Sé que no es ramen,

Cuando Tenten le preguntó cómo había sentido cómo se sentía su rasengan durante la noche, se rió y se disculpó. "Salí a hacer pipí anoche y pateé algo mientras estaba allí en la oscuridad. Me había olvidado de traer una luz conmigo, así que usé un rasengan para ver qué había en las hojas. Supongo que eso fue un poco excesivo. Lo siento si eso te despertó ". Se había reído otra vez, pero no había habido alegría en su voz.

"Entonces, ¿qué fue?" Hanabi había preguntado y cuando Naruto la miró, su rostro palideció por un momento como si hubiera visto un fantasma. Luego sacudió la cabeza y tragó antes de volver a mirar su tazón y respondió en voz baja. "Era solo una roca graciosa, nada realmente especial".

Luego, mientras las chicas habían ido a un arroyo cercano para limpiar los platos del desayuno, Naruto le había pedido a Shimata que lo ayudara a derribar su tienda. Hablaron en voz baja sobre algún tema y se detuvieron abruptamente cada vez que ella o una de las chicas se acercaban demasiado. Más tarde, cuando ella le preguntó a Shimata de qué hablaban en voz tan baja, él se encogió de hombros y dijo que estaba preguntando por el rasengan, pero había evitado el contacto visual con ella como si estuviera ocultando algún secreto.

El resto de ese día y el que siguió fueron extraños, al menos en lo que respecta a Naruto. Apenas habló con nadie, excepto cuando se le habló directamente, y solo caminó con la cabeza ligeramente hacia abajo. De vez en cuando, Tenten había notado que su cabeza y sus labios se movían como si estuviera conversando con alguien. Ella supuso que él podría haber estado hablando con el Kyubi y no estaba seguro de qué pensamiento la molestaba más, que estaba hablando consigo mismo o con el biju que tenía dentro de su cuerpo. Sabía que los dos habían hecho amigos, pero las terribles historias que le contaron en su infancia sobre los Kyubi que atacaron la aldea a veces aún eran difíciles de superar.