El frío de la noche me recibe acompañado de estupefacto Daimiel que no hace mas nada que mirarnos con sorpresa.
Alejandro se baja y cierra la puerta detrás de el y busca mi mano, entrelaza sus mano con la mía y puedo sentir una descarga de emociones que me recorre por todo el cuerpo por el contacto. Daimiel sigue con su vista el gesto y abre la boca exageradamente, intenta pronunciar algo pero solo logra conciliar balbuceos entre cortados .
- Ya, deja la gafeda y termina de decir.- le reprocho divertida.
Alejandro se ríe y le da unas palmadas en la espalda.- Respira y sueltalo hombre.-
Daimiel traga grueso dramáticamente y nos mira divertido.- No voy a preguntar que estaban haciendo por que es un poco obvio.... Bueno lo que no me queda claro es tu cara Sally.- me señala y yo me giro para ver mi rostro en un vidrio de la camioneta .
- ¡O DIOS MIO!, mi maquillaje.- suelto al ver el desastre que tengo en el rostro.- Daniela me va a matar.- digo dramáticamente lo que hace que Ale se ría. Se para a un lado de mi, toma mi rostro y puedo ver una gran sonrisa en el suyo, pasa sus pulgares con mucho cuidado por mis mejilla en un intento de limpiar el desastre que hay en ellas.
- Ahora no se ve tan mal.- exclama dándome un beso en la nariz, lo que le respondo con un puchero.
- Esta todo echo un desastre.- me quejo.- no puedo entrar así-
- OK en definitiva eso no lo hacen los mejores amigos dejenme decirles.- comenta Daimiel.- Separence un poco quieren.- dice apartando a Alejandro de mi.- Tu manten tus manos fuera de ella.- le dice en un tono cerio .- Y tu, no te preocupes podemos llamar a Dani para que arregle tu horrible rostro.- Bromea para mi.
- Sera!.- resoplo fastidiada.
- Vine a buscar los regalos de Charlot, sera que me abres la cachuela querido Romeo .- bromea caminado a la parte de atrás de la camioneta. Ale gruñe con fastidio y le pasa el seguro lo que hace que la compuerta se abra de un toque .
- Santos y como supone Daniela que yo lleve todo esto, se necesitan como dos personas mas para cargar esa cajota.!- sentencia.
La curiosidad me gana y camino a la dirección de mate para ver a que se refiere, y cuando llego a su lado puedo ver una gran caja de color azul celeste con unas bellas letras a color dorado que dicen " Feliz cumpleaños burbuja", y si que es grande, ocupa toda la cachuela y no es nada mas ese de talle hay un arreglo de flores y chocolate sobre ella, pero muchos chocolates, tanto que se me hace agua la boca .
- Eso si que es grande, que le va a regalar un ¿¡dinosaurio!?- suelto divertida- Que tantas cosas no cabrán hay adentro.-
- Ya sabes como es Daniela- responde Mate, restándole importancia- le escribo a Dani para que venga ayudarte,y que traiga unas cuantas manos para cargar esto- comenta caminando en dirección a Alejandro.
A lo lejos puedo escuchar como Daimiel charla animado con Ale, y me pierdo en mis pensamientos: No puedo creer que queda muy poco para que los gemelos cumplan la mayoría de edad, el tiempo se me escapa de las manos, ya son casi diecisiete años transcurridos, en los cuales hemos reído llorado y sufrido como nadie,y agradezco que estén presentes en mi vida, que fueron mi pilar en esos momentos de desilusión y desesperación.
¿Que abría sido de mi, si ellos no me fueran apoyado?, dado ánimos y alientos para seguir. Ahora que lo pienso bien, son mas que importantes para mi; son vitales para mi felicidad.
Me abrazo por que el frío de la noche hace su presencia a pesar de que Caracas es una cuidad,que por lo regular, hace calor siempre esta presente ese Pacheco que marca con su encanto, y no traer una ropa muy abrigable que se diga no ayuda.
