Ahí estaba yo,
concentrada en mis asuntos,
con mis órbitas en orden,
concentrada en mí.Empezaba a creer que el amor, en realidad, era un mito.
Entonces ahí estabas tú,
entrando a mi vida,
llamando mi atención
y dispuesto a derrumbar mi mundo con tu mirada.Ahí estábamos nosotros,
dándonos sentido.—f.v
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el jardín de las palabras.
Poesíahasta la rosa más linda está cubierta de espinas. - pequeñas poesias escritas por mi.