14. San Valentín ⅓

902 78 7
                                    

Kirk frota su nariz contra mi cuello, algo que se estaba convirtiendo en costumbre. Yo sigo viendo hacia adelante a Sam y Patrick, quienes hablaban de la fiesta de la fraternidad por San Valentín.

—¿Entonces vendrán?

Pregunta esperanzada Sam. Ante cualquier pregunta Kirk se separa de mí pero no deja de mírame.

Había evitado hablar sobre ese tema, Kirk me había propuesto que asistiera con él a la fiesta, para que todos se dieran cuenta que lo nuestro iba en serio. Sabía que no le importaba lo que las personas pensaran, pero tenía que dejar en claro que todo lo que sentía el uno por el otro era verdadero y real.

—En realidad no lo sé.

Respondo viendo a Sam, aunque puedo sentir la mirada de Kirk sobre mí, insistiría hasta que aceptara a ir con él, eso era claro y seguro. Entrecierra sus ojos y lentamente se acercó hasta mí hasta colocar sus labios detrás de mí oreja, mi punto débil y era obvio que él lo sabía. Coloca un beso justo en ese punto y rodeando mi cadera se separó hasta verme a los ojos.

—¿Quieres ir conmigo a la fiesta, star?

Entrelaza su mano sobrante con la mía y me mira fijamente. Sonriendo de lado y coloco un beso en la comisura de sus labios. Afirmó y él solo me mira demasiado feliz.

—Claro. Aunque he escuchado que esas fiestas dura demasiado, tal vez debería quedarme en casa  de Samdespués de la fiesta.

—En realidad, planeaba ir al departamento de Patrick— comenta Sam haciendo que posará mi mirada sobre ella—. Lo siento, pero si quieres puedes ir con nosotros. ¿Cierto, cariño?

Sam golpeó el pecho de Pat, haciendo que este mirará entre mi amiga y yo. Se notaba desanimado, como si la idea de estar en su departamento al mismo tiempo que ella fuera terrible.

—Yo te llevaría a mi casa— Kirk alejó su agarre de mí—, pero probablemente mi madre no estará de acuerdo.

Suspiré derrotada. Sabia que mi madre no dejaría que llegara a casa demasiado tarde, era exigente con las reglas que tenía y si no las cumplía era capaz de todo. Dando un suspiro, Patrick asintió en dirección Sam, ella se levantó algunos centímetros para alcanzar a Patrick y colocar besos sobre todo el rostro de su novio, haciendo que una sonrisa apareciera en el rostro de él.

—Gracias, cariño.

—Si tenían algo planeado puedo hacer otra cosa, incluso puedo quedarme en tu casa. Creo que tu mamá estaría feliz de que estuviera ahí.

—No— negó Sam—. Saldrá de viaje de nuevo y Olivia cuidará a Jack durante la noche.

—Pero pensé que iría a la fiesta.

Dando un suspiro negó, no la había visto jamás tan preocupada por su hermana, sonaba demasiado malo pero así era. La dos habían sido tan solitarias y codependientes que nunca una necesito de la otra, había sido así desde siempre, pero cuando alguna de las dos sufría era inevitable que la otra no acudiera a su ayuda, como Sam lo había hecho días atrás.

—¿Habló con aquel chico?

—Lo hizo y él simplemente la mando al diablo— negó y bajo su cabeza—. Me siento tan mal por ella, y si en verdad hubiera estado embarazada como lo indico la primera prueba hubiera sido la peor cosa.

—Pero no fue así, cariño— Patrick la atrajo a su pecho—. Además nos tenía a nosotros.

Su comentario fue tan tierno que me fue inevitable no colocar mi barbilla en la palma de mi mano mientras miraba en su dirección. Parecían tan tiernos juntos.

En mi pielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora